11 | Mi infierno

La risa de Avery, un sonido seco y descarnado, me taladraba los oídos. Se reía de mí, de la rabia que me quemaba por dentro. Yo era el Segador, un hombre de acero y plomo, un rey de la oscuridad, y esa niña me miraba con burla. No había dolor en su rostro, solo una sonrisa de loca, como si hubiera perdido la cabeza.

Mis manos, puños cerrados a mis costados, temblaban cuando la escuché reírse. La escuché burlarse de mí, me sacó del sueño. Descalzó salí de mi cama y abrí la puerta de su habitación, pero no la encontré. La maldita había escapado. Corrí escaleras abajo y la encontré en los rosales, sangrando, riéndose. La imagen era horrorosa. Verla llena de sangre, arrancando rosas, riendo, fue escalofriante, incluso para mí que veía morir personas a diario.

—¿Te parece divertido? —pregunté, mi voz era un susurro peligroso, casi un gruñido.

—No lo sé —respondió ella, su risa se volvió más fuerte—. No sé qué me da más risa, si el hecho de que crees que puedes romperme, o que te molestes t
Sigue leyendo este libro gratis
Escanea el código para descargar la APP
Explora y lee buenas novelas sin costo
Miles de novelas gratis en BueNovela. ¡Descarga y lee en cualquier momento!
Lee libros gratis en la app
Escanea el código para leer en la APP