Violet es una mestiza Omega mitad humana que se topó a los seis años con el lobo que rompería su corazón al llegar a Grayville un pueblo en Boston donde se encuentra Red Moon la manada a la que regresa con su padre en busca de refugio. Lo que comenzó como un cuento de hadas junto a su mate se volvió una pesadilla. ¿Qué podía ser peor que ser rechazada por el compañero que la luna te asignó? Y la respuesta era ser rechazada por el Alfa de la manada y dueño de todo, e incluso tu jefe. Aarón Connor es el director ejecutivo de una poderosa constructora llamada Alpha Orion. Aunado a su cargo como el ceo de su imperio familiar, Aarón era el siguiente en la línea de sucesión para ser el Alfa de Red Moon, un fuerte clan de lobos metamorfos. Violet Swan es una joven loba rechazada por ser mitad humana. A la edad de seis años fue salvada por Aarón y desde el momento en que el joven lobezno salvó a la cachorra, el lazo del destino los ató a ambos para siempre. El lazo de la luna no fue suficiente, pues Aarón rechazó a su loba por ser una Omega híbrida. Pero eso solo era de boca para afuera, pues aunque Aarón negara sus sentimientos por su mate, no permitía que ningún otro pusiera sus garras en lo que él consideraba suyo.
Leer másVIOLET SWAN.
꘎♡━━━━━━━♡꘎ Cada día me pregunto porque la vida tiene que ser tan injusta conmigo, ¿Acaso es un pecado ser diferente? ¿Es mi culpa ser como soy? Son las preguntas que me hago a diario, ya que para algunos mi sueño es una completa tontería, pero para mí es lo más importante aunque sea impensable. Siento como las lágrimas se deslizan una tras otra por mis mejillas. Después de sentir que subía al cielo, tocaba las estrellas con mis propias manos, rápidamente bajé al infierno de un solo tirón. Me quité las sábanas de encima con un puntapié y salí corriendo al baño. — ¡¿Porqué?! — cuestiono con los labios temblorosos entrando a la ducha. Deja de llorar de una vez por todas Violet, él no merece una sola lágrima más — me repito una y otra vez, con la sola intención de convencerme a mí misma. Mi espalda se desliza tras cerrar la puerta hasta que mi trasero toca el frío suelo de mármol dando un respingo e incorporandome de inmediato casi dando un salto y pongo a llenar la bañera. Necesito limpiar mi cuerpo de cualquier rastro que él hubiera dejado en mí. Sabia que nada de esto funcionaria, aunque lo sabía creí que al menos me haría sentir mucho mejor. Una vez que la bañera está lista, introduzco mi cuerpo para poder camuflarlas con el agua. — ¡Violet! — mis ojos se abren y siento el corazón latir con fuerza al escuchar el tono autoritario de su voz. No respondo, me quedo completamente callada ya que no quiero verle la cara, pero no respeta mi espacio personal y entra al baño, acercándose a la bañera. — ¿Qué haces aquí? — pregunto sin mirarlo a la cara. — ¿Acaso no estás escuchando que hablo contigo? — se sienta al borde de la bañera y me mira con arrogancía. — Lárgate — a pesar de querer sonar autoritaria, mi voz es muy baja, pero estoy muy segura que me ha escuchado perfectamente. — ¿Porqué abandonaste la cama? — inquiere con una extraña gentileza — Esperaba tenerte a mi lado cuándo despertara. — ¿Porqué no te vas de aquí y me dejas en paz? — lo fulmino con la mirada sintiendo que todo el cuerpo me tiembla — Ya tienes lo que tanto querías, Aarón, ahora déjame en paz — arrastro las palabras. Siento tanta rabia por dentro, tristeza y miedo en partes iguales que abrazo mis piernas con fuerza, en un vano intento de mantenerme segura. — ¿Estás asustada, cachorra? — pregunta con burla y me toma de la barbilla con fuerza obligándome a mirarlo directamente a los ojos — Lo peor ha pasado ya, pastelito — musita sin soltarme. — ¡No me vuelvas a llamar de esa forma! — le doy un manotazo en la mano para que no toque mi rostro. Veo cómo su rostro se transforma y me toma con tanta hostilidad del cabello sacandome de la bañera, completamente empapada y desnuda. — ¿Qué estupidez es esa que no puedo tocarte? — gruñe Aarón, sin una pizca de tacto — Te voy a decir como se me venga en gana Violet, porqué a partir de ahora eres mi pequeño pastelito — me suelta con brusquedad quitandose la ropa y entrando junto a mi a la gran bañera. Sus ojos me miran con una mezcla de deseo y rabia, sorpresivamente se acerca a mí tomandome de manera posesiva por la cintura haciendome sentir un enorme escalofrío que me recorre todo el cuerpo. Me siento asustada, nerviosa, no tengo idea que tiene pensado hacer conmigo y por más que intento luchar con él para que me deje ir, es completamente difícil, mucho más cuando siento su aliento sobre mi cuello erizandome la piel ante su tacto. — Escuchame muy bien, Violet — murmura cerca de mi oído debilitando mis piernas y mi cordura — Escuchame, ya que diré esto una sola jodida vez, pastelito — detesto que me diga de esa forma. Aunque admito que es un lobo atractivo de piel blanca y cabello negro como una noche sin luna — No quiero verte con ningún otro lobo, ni mucho menos un humano — amenaza — Tú, eres solamente mía. ¡Solamente mía pequeña chiquilla estúpida. Siento como sus palabras me rompen por dentro. — ¡No es justo! — sollozo forcejeando para que me suelte. — Tienes razón pastelito — acaricia mi cabello mojado — No es justo para ti, eso lo sé perfectamente — se burla de mpi — Y la verdad es que no me importa como te sientas, para tú desgracia resultaste ser mi compañera — mi pulso se acelera cuando aprieta los dientes como si decirlo le causa asco. — Entonces, déjame ir… — No sueñes, ni siquiera pienses que dejaré que algún imbécil toque lo que es mío, aunque no te amo, me perteneces. — N-no lo entiendo — titubeo viéndolo a los ojos — ¿Porqué tienes que ser así conmigo, Aarón? — mis ojos se cierran tras la pregunta, quiero intentar detener el llanto — Ya has sido claro, no me quieres, y apenas nos une este maldito lazo que tanto odias. — ¡Es tu castigo por ser una niñata estúpida! — me grita a la cara y quiero que me deje en paz, no soporta la crueldad de sus palabras. — ¡¿Entonces, porqué me castigas de está manera?! — cuestiono intentando igualar su tono de voz, pero fallando en el intento. — No sabes cuanto te odio, Violet — su mano aprieta mi muñeca, lastimandome — He debido dejar que te ahogaras en ese m4ldito río — niego con la cabeza y me fundo en esa mirada oscura. Se inclina con rabia besando mi cuello y haciendome cosquillas. Odio sentir esto, pero la sensación en mi pecho es de profundo hundimiento. Sus palabras son veneno que se sientes como dagas a quemarropa entrando lenta y dolorosamente en mi piel. — ¡Pues, has debido dejarme morir en ese lugar! — grito furiosa, haciendo que mi garganta me arda. No soporto más sus humillaciones, de haber sabido que salvarme la vida me costaría tan caro, hubiera preferido morir allí mismo en la caída. Ahora mismo la muerte suena mucho más placentera. Pero, no dice nada, no me responde. Simplemente se marcha de allí, dejandome con el alma destrozada, emocionalmente humillada y puedo ver como el agua escuche por la espalda de aquel lobo siniestro, con ese cabello negro dejando rastros a su paso. Me sumerjo por completo en el agua frotando, removiendo cada rastro de su olor, de su contacto con el mio, pero por más que tallo y tallo, lo que hago es dañar mi piel, enrojeciendo y tratándola con brusquedad. Mientras que Aarón, sigue intacto. ꘎♡━━♡꘎ AARÓN CONNOR. Estoy tan enfadado, que no puedo evitar golpear el colchón con los recuerdos de aquel momento. No puedo creer como mi vida ha cambiado desde que decidí salvar a esa pequeña de ahogarse, de ese aroma dulzón. El consejo me impondría todo, lo que haría y hasta con quién me debo casar, pero en mis planes definitivamente no estaba que Violet, fuera una mestiza. Eso, simplemente mancillar el linaje de los Connor. ——🩶—— Voy caminando tranquilamente, hasta que un grito infantil llama mi atención y corro buscando la fuente de dicha pedida de auxilio, en ese momento veo un pequeño cuerpo ser arrastrado por la fuerte corriente del río. Sin pensarlo dos veces, me sumerjo al agua para rescatar al pequeño. — ¡Resiste, te ayudaré a salir! — solo logro escuchar los sollozos del pequeño, debe sentir mucho miedo. Con esfuerzo, consigo llegar cerca y poco a poco lo llevo a la superficie sacandolo de las aguas heladas. Parece estar desmayado, así que lo coloco lejos de las aguas frías e intento despertarlo, pero nada, simplemente no reacciona y parece que nada va a funcionar. Así que en un rápido movimiento me inclino para darle respiración de boca a boca. En ese momento, comienza a recuperar la conciencia y un par de ojos ambarinos muy brillantes me dejan ver las lágrimas acumuladas. Me observa con asombro, como si no pudiera creer que estuviera vivo en este momento. Aún así, no puedo negar que al ver esos ojos, siento una extraña corriente eléctrica por todo mi cuerpo, haciendo que mi lobo interno se descontrole extasiado ante la dulce fragancia que emana de su pequeño y frágil cuerpo, debajo del mío. — G-gracias por salvarme… — titubea en un pequeño hilo de voz, y sus ojos vuelven a llenarse de lágrimas. Entonces se abalanza sobre mí con los brazos abiertos sin siquiera pensarlo — ¡Tenía mucho miedo, creí por un momento que moriría! Conscientemente correspondo a cierto contacto. Y mi ceño se frunce por la confusión que siento en este momento. — Oye niño, ¿me dices cuál es tú nombre? — pregunto y aparto su cuerpo del mío, viéndolo a los ojos. — No soy un niño — dice entre pequeños hipidos viendo cómo se sonroja y nuestros ojos no han dejado de mirarse. Ahora me siento como un estupido, y totalmente confundido — Mi nombre es Violet, soy una niña. — Violet — saboreo el nombre de la pequeña castaña frente a mí — Entonces, eres una niña, una muy tonta. ¿Si lo sabías? — Lo sé, es que yo… — ¿Cómo se te ha ocurrido meterte en ese río con la corriente tan fuerte? — averiguo — Ha podido pasarte algo, si no hubiera estado por allí… Repentinamente me callo de golpe al sentir como ella vuelve a aferrarse a mi cuerpo con todas sus fuerzas. Sé que tiene mucho miedo, no es para menos luego de la caída que ha sufrido. Sin embargo, por alguna razón que desconozco, no me gusta escucharla llorar, eso sumado a que ese aroma tan dulce me hace sentir completamente diferente una vez más. Sin pensarlo nuevamente, correspondo a ese abrazo y no la suelo. es como si quisiera que se quedara entre mis brazos para sentir el ferviente deseo de querer protegerla para siempre. En ese momento recuerdo las palabras de la abuela Genna:VIOLET SWAN. ꘎♡━━━━━━━♡꘎Siento como todo el cuerpo me tiembla por el cúmulo de sensaciones que estoy experimentando en este momento. Mis sentimientos hacen que el latir de mi corazón sea tan fuerte que pareciera que se saldrá de mi pecho en cualquier momento. Sus ojos azules tan intensos, me miran fijamente y con desafío que me cuesta apartar la mirada para no parecer una tonta. Si flaqueo ante su dominio voy a perder el poco autocontrol que todavía pueda quedarme. Soy una completa tonta al dejar que esto sucediera, pero no puedo evitarlo cuando utiliza esa voz que me domina, mejor dicho, que domina la pequeña loba asustadiza dentro de mí. Los labios recorren mi cuello, mi espalda sobre la madera de su escritorio y los papeles esparcidos en el suelo es lo que vi en cámara lenta. — No hay nada que más desee ahora mismo, que hacerte mía — vuelve a besarme y puedo sentir el tacto de sus dedos rozando mi piel ahora expuesta. El frío del aire acondicionado me causa escalofríos haciendo
VIOLET SWAN. ꘎♡━━━━━━━♡꘎ — ¡Al fin es viernes! — digo emocionada. Se supone que tendría este fin de semana para pasarla en mi cuarto viendo series y comiendo toda clase de aperitivos. — Lo dices como si tu jefe fuera un tirano — dice Lanny de forma graciosa, pero ella sabe lo muy estresante que es ser la secretaria de Aarón Connor. — No solo es un tirano y… — digo en voz baja al ver al susodicho venir en nuestra dirección y no ser capaz de decir ni un “buenos días” — Hablando del diablo — no me importa que me escuche — Es un completo grosero, un patán, un… — Un patán muy, pero muy comestible — dice una pelirroja que está con Lanny conmigo — Violet nena, necesito que tu jefe firme estos papeles, Kody los necesita. — ¿De qué se trata? — pregunto con más hostilidad de la necesaria tomando la pila de papeles de las manos de Layla, la pelirroja. — Es el contrato del nuevo proyecto de la constructora Connor — explica ella jugando con un mechón de cabello de forma insinuante. Mi
VIOLET SWAN.꘎♡━━━━━━━♡꘎ Ya no veo la hora de largarme de este tonto pueblo llamado Grayville, siento que nada me ata, nada más que un lazo del cual nada sirve si el otro extremo de dicha unuón, me rechaza cómo lo hace. Cuando llego a la oficina por fin, me doy cuenta que todo está en silencio o todos están muy metidos en sus trabajos, o significa que el consejo estaba aquí. Seguramente el imbécil de Aarón ya había llegado. Por lo general, su majestad casi nunca mete sus narices en este lugar, así que si Aarón se encuentra aquí, sería darle un punto extra a mi ya mala suerte. — ¡Violet! — escucho la voz de mi amiga Lanny llamarme. Camino hasta ella y al ver esa expresión que pone, empiezo a tener escalofríos, conozco esa sonrisa retorcida de sobra. — No me gusta tu cara — soy sincera. — Amiga, tienes que contarme todo a detalle — dice emocionada — Primero se fueron a cenar, ahora te cambia de lugar. Vi, de nada sirve que te escondas y mucho menos que lo niegues, Aarón ya te ha
VIOLET SWAN ꘎♡━━━━━━━♡꘎ La noche anterior, definitivamente ha sido una que prefiero no recordar jamás en mi vida. He llegado a casa y el olor a tocino me hace agua la boca. — Ezra — llamo, esperando su respuesta, pero simplemente no pasa nada. Entro a la cocina y lo veo allí, sentado, esperandome con un semblante serio — ¿Porqué no respondes? — Creí que no estabas — digo por inercia y al ver lo que se viene a continuación prefiero tomar asiento frente a mi padre, esperando sus palabras. «Lo único que no tienes que decirle, es que estabas con ya sabes quién» pienso, esperando lo que tenga que decir mi padre. — He recibido una llamada de tu hermano, Violet — suelta — Me dice que está preocupado porqué no llegaste a casa — me quedo callada esperando que continúe — ¿Que estabas haciendo? Sabes perfectamente que no me gusta que estés por allí tú sola, me habías dicho que… — Si, ya sé lo que dije — me levanto molesta de la mesa, no hay necesidad de que me recuerde las cosas
VIOLET SWAN.꘎♡━━━━━━━♡꘎ Cada día me pregunto porque la vida tiene que ser tan injusta conmigo, ¿Acaso es un pecado ser diferente? ¿Es mi culpa ser como soy? Son las preguntas que me hago a diario, ya que para algunos mi sueño es una completa tontería, pero para mí es lo más importante aunque sea impensable. Siento como las lágrimas se deslizan una tras otra por mis mejillas. Después de sentir que subía al cielo, tocaba las estrellas con mis propias manos, rápidamente bajé al infierno de un solo tirón. Me quité las sábanas de encima con un puntapié y salí corriendo al baño. — ¡¿Porqué?! — cuestiono con los labios temblorosos entrando a la ducha. Deja de llorar de una vez por todas Violet, él no merece una sola lágrima más — me repito una y otra vez, con la sola intención de convencerme a mí misma. Mi espalda se desliza tras cerrar la puerta hasta que mi trasero toca el frío suelo de mármol dando un respingo e incorporandome de inmediato casi dando un salto y pongo a llenar la
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