Capítulo 60

Elio llegó a su mansión pasada la medianoche. El silencio lo recibió con la misma frialdad que lo habitaba por dentro. Dejó las llaves sobre la mesa del recibidor y caminó directo a su despacho, con pasos pesados, arrastrando el peso de un día que había terminado por desbordarlo.

Lo primero que hizo fue tomar un vaso de cristal y servirse whisky hasta el borde. Necesitaba apagar el ruido en su cabeza, el eco de las palabras de Rubén, el sonido de la voz de Isaac llamándolo “tío”. Dio un trago largo, sintiendo cómo el licor le quemaba la garganta, pero aun así no lograba calmar el fuego que llevaba dentro.

En ese instante, su teléfono comenzó a sonar sobre el escritorio. Miró la pantalla: Laura.

Suspiró con fastidio, pasó una mano por su rostro y contestó con voz cansada.

—¿Aló?

Del otro lado se escuchó la voz preocupada y un poco tensa de la mujer.

—Elio, te estamos esperando. Tu hijo no deja de preguntar por ti, no sé qué decirle. ¿Vas a venir o piensas quedarte otra vez en ese maldi
Sigue leyendo este libro gratis
Escanea el código para descargar la APP
Explora y lee buenas novelas sin costo
Miles de novelas gratis en BueNovela. ¡Descarga y lee en cualquier momento!
Lee libros gratis en la app
Escanea el código para leer en la APP