Nombrando al bebé de Doménico.
Doménico se quedó en la sala de espera, como si fueran una pavada de poderosas águilas, Dimitrir, Rafael, Dominic, y Adriano De Luca, se encontraban distribuidos en los sofás, ellos no dejarían solo a su impulsivo amigo.
— ¿Doménico, ya intentaste entrar a hablar con Stella?
— Por supuesto, Dimitrir, pero mi suegro dijo que ella todavía dormía, no sin antes decirme que no era bien recibido en la habitación.
— ¿Quién puede culpar al señor Black? Cómo hayan sido las cosas, Stella lloró mucho, la lastimaste justo el día en el que te dió a tu hijo, ahh... Apenas tu eres capaz de hacer esas hazañas.
— Dimitrir, ¿Te recuerdo como te enteraste del embarazo de Vladimir? Recuerdo que te encontraste a Angelic en una reunión...
— Basta, todos cometemos errores, pero no por eso vamos a perder lo que más amamos. Así que vas, vuelve a tocar la puerta, Adriano ya trajo la demanda, puedes mostrarsela a tu suegro.
Doménico mal miró a su amigo Rafaela, eso iba a enfadar muchísimo al seño