No se debe contradecir al CEO Darkok.
Siendo una reconocida arquitecta que siempre estaba en constante actividad y creando nuevos diseños, era difícil para Angelic permanecer en cama sin hacer lo que le gustaba. Pero su esposo no pensaba lo mismo, él la quería guardando reposo y siendo cuidada por él.
— Cariño, no te enfades conmigo, tienes que comprenderme, ¿Qué harías tu si tuvieras que guardar cama por tanto tiempo?
— Delegaría mis funciones a mi equipo, si no estuvieran preparados lo suficiente no los habría contratado, así que desquitar el muy buen sueldo que les pago no estaría nada mal.
— Bueno, es que tú trabajo son los negocios, otros pueden hacer lo que haces, no tan bien como tú, claro está, pero lo mío solo lo puedo hacer yo, lo que tengo en mi cabeza es solo mío.
— Así que... ¿Lo que hago yo lo pueden hacer otros, eh? — Más molesto estaba el CEO.
— Dije que no tan bien como tú, que quede claro.
El hombre dejó escapar el aire, su esposa no entendía lo que él pedía.
— Sé muy bien que lo que ha