230. EL CAPO GARIBALDI
Fabrizio sigue impartiendo órdenes a todos a su alrededor. Le pide a su hermano menor, Carlos, que lo acompañe; a su esposa, que vaya a cuidar de su hija Coral; y al Greco, que lleve a su esposa a la habitación donde está su hija. También le pide que lo encuentre en el despacho del doctor Luigi, diciendo que van a aclarar todo.
Todos lo miran asombrados y se dan cuenta de por qué es el capo mayor de la familia Garibaldi; incluso el capo Greco lo observa con admiración.
—¡Filipo! Junto a Anastasío, el segundo del Greco. Pongan una alta vigilancia en todas las entradas y salidas del hospital, incluyendo la azotea. No vaya a ser que a Eurípides le dé por querer aprovechar la situación ahora —le ordena a su hijo, quien lo obedece de inmediato.
—Flabio, pon en alerta a todos nuestros hombres en la ciudad. Que cuiden no solo los negocios nuestros, sino los del Greco también —ordena a su otro hermano.
—Muy bien, hermano. Dalo por hecho —dijo, saliendo a cumplir la orden de inmediato.
—Carlos