La tarde caía y Victoria aún se sentía temerosa de lo ocurrido con Laurent Visconti, sin embargo, no quería poner mala cara, no deseaba bajo ninguna circunstancia que Lorenzo descubriera que algo había ocurrido…aunque, reconocía, no era muy buena disimulando, Liam y William corrían hacia ellos, aquel día no habían asistido al colegio por una junta especial y en solo unos días más comenzarían las vacaciones de verano.

Los pequeños se hallaban demasiado entusiasmados por ello, y tomando a sus hijos entre sus brazos, Victoria pensó de nuevo en lo ocurrido con el mayor de los Visconti…si algo malo llegaba a ocurrirle, Liam y William se quedarían solos, por ello, comenzaba a debatirse si su decisión de no mencionar nada a Lorenzo era la correcta, ¿Hasta dónde llegaría la próxima vez? No quería averiguarlo, por ello, aprendería a defenderse…y, quizás, también se lo diría a su amado.

—Señor Lorenzo, ¿Nos puede enseñar a pelear a Liam y a mí?, mamita llegó llorando hoy, y ella siempre decía m