Narrado por Rafael

Las planillas financieras sobre mi escritorio se mezclaban con las sombras del atardecer, los números borrándose en formas sin sentido. Cerré los ojos, pero la imagen que perseguía mis días invadió la oscuridad: Flavia. Sus ojos azules como lagos cristalinos, la forma en que mordía el labio inferior al concentrarse en los dibujos de las gemelas, la curva de su cuello cuando reía. Un mes y medio. Un mes y medio desde que entró en esta casa, y todas mis rutinas se convirtieron en polvo.

Abrí el cajón superior, donde estaba el informe del detective privado. Leí las palabras por centésima vez, hasta quemar cada línea en la memoria:

“Flavia Carter, 23 años. Violada a los 19 por un vecino después de la fiesta de su propio cumpleaños. Proceso archivado por falta de pruebas. Se mudó tres veces en los últimos dos años. Actualmente cursa diseño y tecnología.”

Apreté el papel hasta arrugarlo. “La había contratado para proteger a las gemelas, sin saber que ella misma necesi