Mundo de ficçãoIniciar sessãoEl amanecer se alzó con una quietud que parecía engañosa. El cielo, teñido de un tono gris perlado, anunciaba un día común en apariencia, aunque dentro de la casa Rothwell nada parecía verdaderamente normal.
Desde el incidente con Isabela, el aire se había vuelto más denso, como si las sombras del pasado hubiesen decidido quedarse a vivir entre los pasillos de aquella casa.
Violeta se miró al espejo mientras trenzaba su cabello, intentando convencerse de que todo iba bien. Había dormido poco, las ojeras delataban su falta de descanso, pero su rostro aún conservaba la calidez de siempre. Al bajar, encontró a Liam en la cocina, de pie junto a la cafetera, revisando su teléfono con gesto preocupado.
—Buenos días —murmuró ella, dejando un beso en su mejilla.
—Buenos días, amor &mdash







