Capítulo 83 —Problema doméstico
Narrador:
Valeria estaba inclinada sobre el escritorio, escribiendo nombres, apodos, fragmentos de recuerdos. Luigi y Dominic permanecían cerca: el primero detrás de ella con una mano en su espalda como un ancla, el otro apoyado de brazos cruzados en un sillón, atento a cada palabra, a cada nombre que salía de sus labios.
Mateo revisaba en la laptop lo que Valeria iba diciendo. Dinorah se apartó un poco, estiró el cuello como si necesitara respirar un aire distinto al que estaban compartiendo.
—Tengo sed —dijo ella, sin rodeos —Voy por algo de beber. ¿Quieren algo?
Dominic levantó la vista.
—Una cerveza estaría bien.
—Yo también —agregó Luigi, sin despegar la mano de la cintura de Valeria.
Valeria sonrió apenas, sin soltar el bolígrafo.
—A mí también —dijo, completamente en broma.
Luigi le dio un golpecito suave en la parte baja de la espalda.
—Ni en chiste —respondió.
Ella se rió. Dominic también.
—Bueno, un jugo estaría bien...
Mateo levantó la cabeza