Capítulo 38 —No voy a ser perfecto
Narrador:
Luigi cerró los ojos, respiró hondo… y cuando los abrió, ya no había ternura. Había cálculo. Estrategia. Y un enojo frío intentando no desbordarse.
—Valeria… —dijo con la voz más controlada que pudo —esto complica todo.
Ella se tensó.
—¿Complica? —repitió —¿Por qué? ¿Por haber vomitado delante de Lorena? ¿O por no haber sabido mentirle como tú lo haces?
Luigi apretó la mandíbula.
—No pongas palabras en mi boca.
—Las estás pensando —escupió ella.
Él la miró fijo, sin pestañear.
—La idea era que nadie lo supiera todavía —dijo, despacio, midiendo cada sílaba para no gritar —Nadie. Íbamos a manejarlo con tiempo, con discreción. Y ahora Lorena lo sabe. Y si Lorena lo sabe…
Valeria lo interrumpió.
—¿Qué? ¿Crees que va a correr por toda la villa anunciándolo?
—No lo entiendes —replicó él —Lorena sabe perfectamente que este niño no es mío.
Valeria sintió el golpe directo al estómago.
—No necesitabas decirlo así —murmuró.
—¿Y cómo quieres que lo di