―Sí, un ultimo acto por nuestra amistad. ―Lamió sus labios. ―Traté de decírselo a mi esposa, quise que me escuchara y se pusiera en mi lugar, pero ella se cerró en banda.
―Y por eso fuiste el imbécil que fuiste. ―Asintió Kalen sonriendo. ―Nunca se te ha dado bien sobrellevar el que no te entiendan. ―Siguió su camino. ―Un neandertal en potencia y tu pobre esposa no sabía eso de ti. ―Se burló cabreando más a Aiden al recordarle que hay cosas que su mujer no sabe de él. ―Estaba dispuesto a sacar a Osiris del país y ocultarla de ti. ―No se inmutó en mirar a su amigo. ―Pero ahora que sé lo que pretendes, te apoyaré. Carlota también es mi amiga.
―¿Te llevarías a mi esposa? ―Aiden sintió el corazón en el estómago. ―¿Me ibas a traicionar de esa manera?
―Fuiste un imbécil, amigo.
―¡Sabes cuál era mi malditø punto! ―Gritó enfurecido. ―Quizás me equivoqué cuando dije que me sentía culpable, pero estabas al tanto de que no podía abandonar a un amigo y no me interesa que digan que los ex no