CAPÍTULO 91. Una derrota bien calculada.
Capítulo 91
Una derrota bien calculada.
La noticia llegó como un eco en los pasillos: la fiscalía ya tenía listo un pedido de captura contra Valeria Martínez. No fue un simple rumor de pasillo, ni un dato que se deslizara en vano por redes; era el zumbido seco de una maquinaria administrativa que se ponía en marcha. Firmas, números de expediente, órdenes de allanamiento.
En pocos minutos el rumor que corría por los círculos jurídicos llegó a cada rincón donde aún olía a poder y a impunidad.
En la mansión Herrera el aire cambió de temperatura. Donde hasta hace horas había reuniones y pautas organizadas, gestos medidos y miradas que lo controlaban todo, ahora se sentía un pulso distinto. Nervios, pasos apresurados, voces ahogadas por teléfonos que marcaban números diferentes.
Valeria estaba en el despacho principal, una habitación amplia de madera pulida y luz cálida, como una reina que estudia su partida final. Cuando su abogado la llamó le oyó decir, sin levantar la voz, “hay una or