Miranda no se atreve a confesar su amor por Darién por ser considerado un amor incestuoso, por esta razón decide marcharse. Pero Darién no puede soportar la idea de alejarse de ella, ambos terminan confesándose su amor y dejándose llevar por sus deseos reprimidos, una confusión lleva a Miranda a creer que ambos ¡son hermanos de sangre! y se va del país sin dar explicaciones Darién se siente traicionado y termina casado con otra mujer, Miranda decide hacer su vida lejos de él, pero meses después descubre que está embarazada, eso la enloquece literalmente, ¡Cree estar embarazada de su propio hermano! y decide acabar con su propia vida, para no darle a su hijo una vida miserable y llena de complejos Años después regresa para la lectura del testamento del señor Ferrer su padre adoptivo, y tiene que permanecer allí durante unos meses para cumplir la última voluntad de él y que su fortuna no pare a una beneficencia pública, Darién cegado por los celos se convertirá en un cruel hermanastro ¿Podrá el amor sanar las heridas de su corazón?.
Ler maisMiranda Ferrer
—Esta muy distraída hoy ¿Qué te sucede? Debes enfocarte, tu futuro depende de esta prueba. — Regaña la profesora a su estudiante favorita Miranda Ferrer.
Si logra enfocarse será una de las mejores bailarinas del país
—Lo siento. —Se disculpa la joven de veinte años, sacudiendo su cabeza para ordenar sus caóticos pensamientos, sabe que su profesora tiene la razón
Mientras continúa practicando su nueva coreografía durante horas, la disciplina es muy importante en esa profesión, las demás bailarinas se marchan agotadas, pero Miranda continúa ensayando hasta muy tarde, para ella las cosas se hacen perfectas o no se hacen.
Horas después la música se detiene y ella voltea la mirada con el ceño fruncido molesta porque alguiense atrevió a interrumpir su práctica.
—Suficiente por hoy. — Pronuncia su hermanastro con los brazos cruzados.
— ¿Qué haces acá?— Logra balbucear la joven, un poco nerviosa por la presencia de la persona que tiene su mundo de cabeza.
—Nuestros padres me pidieron que pasara por ti, es tarde y hoy tenemos una cena especial. — Le responde.
Ella no reacciona por un instante, él da media vuelta y comienza a avanzar, ella se apresura a recoger sus cosas para seguirlo
El siempre ha sido el hombre más bello para ella, nunca desde que su familia la adopto, logro verlo como un hermano, aunque él se empeña en llamarla hermana cada vez que tiene oportunidad.
Darién, tiene la piel dorada contrasta con unos exóticos ojos grises y además practica varios deportes razón por la cual es una pared de músculos de un metro noventa.
—Apresúrate. — Ordena desde la puerta de la salida del edificio, sin voltear a mirarla.
—Voy. — Responde entre dientes Miranda casi corriendo detrás de él.
El sube a su auto sin abrirle la puerta, cosa que hace con sus novias, pero Miranda no puede reclamar nada ya que ella es solo su hermanita.
Cuando ella sube a su lado en el puesto de copiloto, no puede evitar suspirar cuando el olor amaderado del perfume de el inunda sus fosas nasales.
—Deberías hacer otra cosa, ese mundo de las bailarinas es muy competitivo. — Comenta, pero aprieta el volante con fuerza, él finge que la conversación que está iniciando no le interesa mucho.
—Soy la mejor de mi clase, estoy segura que conseguiré ese contrato. — Asegura Miranda tratando de controlar el temblor de su voz, no puede creer que precisamente él no crea en ella.
—No soporto la idea de que te vayas. — Admite él en voz tan baja que ella se pregunta si en realidad el acaba de decirlo o es una alucinación de su parte.
Darién enciende la música para no escuchar lo que ella tiene que decir al respecto, para Miranda el ballet es su pasión y no renunciara por nada, ni siquiera por él, que en secreto es la persona más importante de su vida.
Ella no sabe cómo interpretar las palabras que el acaba de pronunciar, pero su corazón comienza a latir a un ritmo apresurado, llenándose de ilusiones y esperanzas.
Lo observa manejar y sus ojos inevitablemente se quedan prendados en los labios de él, son rojos y carnosos, siempre se ha preguntado cuál será su sabor…
—Llegamos. —Anuncia él, y ella se despabila, el tiempo pasa volando cuando él está cerca.
Apenas el mayordomo abre la puerta, la señora Ferrer se queja — ¿No puedes ser puntual una vez en tu vida?— Reclama.
—Lo siento—. Titubea Miranda.
Cuando entra al comedor se encuentra con que el socio mayoritario de la empresa de su padre está allí, con toda su familia.
Durante la cena los ojos de Darién y Miranda se cruzan en varias oportunidades, ella enrojece y trata de disimular lo mucho que le afecta la presencia de él, las mariposas en su estomago casi no la dejan probar bocado.
Miranda teme que alguien se percate de la forma que ve a Darién, ¡que alguien en su familia se dé cuenta que está enamorada de su propio hermano!
Los ojos de Miranda por poco se salen de sus orbitas cuando Darién se pone de rodillas ante Alma la hija del socio de su padre, ¡no puede creer que eso está ocurriendo!
— ¿Te quieres casar conmigo?— Cuestiona, la otra mujer asiente con los ojos llenos de lágrimas
Miranda siente que su mundo se rompe en mil pedazos, quiere gritar, las lágrimas recorren su rostro, sabía que ese día llegaría pero no tenía idea que tan pronto.
Todos felicitan a la pareja Darién sonríe y abre los brazos hacia ella — ¿No piensas felicitarme hermanita?— Cuestiona.
Ella lo abraza y esconde su rostro bañado en lágrimas en el pecho de su amado, siente un dolor tan profundo como un puñal clavado en su pecho.
El compromiso fue anunciado y a pocos días de la boda de Miranda, Alexander le pide sin derecho a negativas que lo acompañe a una cena importante, sin ella el es un desconocido.Ella accede a regañadientes y se viste sin ánimos de llamar la atención pero cuando él la va a buscar apenas la ve le planta un beso en la boca que ella no se esperaAl momento queda sin reacción alguna –Acostúmbrate, depuse que nos casamos no te quitare las manos de encima. — Le aclara, viendo el terror en los ojos de ella.—Sabe que la doctora dijo que era un embarazo de alto riesgo y no podía mantener relaciones sexuales. — Le responde ella, el sonríe divertido, ya el descubrió la mentira de ella hace rato.—No te preocupes a nuestro bebe no le pasara nada. — Le aclara.—No es nuestro bebe. — responde ella de inmediato.— ¿Me lo tienes que recordar cada instante? Por favor no me digas que sigues pensando en Darién, al no le importas, vive su vida feliz con la mujer que por poco arruina la tuya. — Le restri
—Localice a Darién, pero no creo que necesite ser rescatado. — Le informa Alexander a Miranda por medio de una llamada—No, te entiendo. — Balbucea Miranda que ya no le quedan uñas en las manos, se las comió todas a causa de la ansiedad—Velo por ti misma. — Le responde el director de la cárcel, mostrando fotos de Alma y Darién comiendo juntos en un restaurante…Se ven felices.Miranda tiembla sus manos no pueden sostener el aparato, parpadea intentando retener las lagrimas, perro es imposible…estaba tan arrepentida de haber tratado mal a su esposo, se sentía tan culpable y ahora el está disfrutando su vida con su peor enemiga eso no puede creerlo.— ¿Estás bien?— Cuestiona su padre, ella asiente, pero debe sentarse, las piernas se le convirtieron en gelatina no podría sostenerla— ¿Qué Sucede? ¿Lo localizaron?— Cuestiona el señor Hill desesperado.—Esta donde quiere estar. — Balbucea ella con la voz quebrada.Los sentimientos de rabia indignación, borran neutralizan por completo todo
— ¡Estoy harta! ¿Qué tiene ella que no tenga yo?— Lloriquea, mientras golpea el pecho de Darien una y otra vez con todas sus fuerzas.— ¡Ella te engaño!, se va a casar con otro y aun así tú sigues queriéndola a ella. — Agrega, sujetándole la cara a Darién, para que la mire directo a los ojos, mientras lo tiene atado a una cruz.—Mátame, de una vez. — Pronuncia en un susurro, con rabia apenas contenida, la noticia del compromiso de Miranda apareció en todas las redes sociales y Alma se encargo que él lo viera.—No, no, no, eso sería demasiado fácil para, tu vivirás en carne propia todo lo que me has hecho vivir a mí, veras como ella se entrega a otro demostrándote una vez más que para ella no vales nada,—Asegura, caminando alrededor de la cruz con una risa histérica.Darién necesita desesperadamente salir de allí, el sabe perfectamente que Miranda lo ama, la personas pueden mentir con los labios…Pero nadie puede fingir el amor de esa forma.—Yo no voy a sufrir por eso, podemos comenzar
Ha pasado una semana, entera desde que despertaste, y te sigues negando a hacerme el amor, ¡entiende de una maldita vez que tu eres mío!— Susurra Alma—Alma lamento mucho todo lo que te hice pasar, soy el culpable de que tú estés mal, pero debes dejarme ir, esto no está bien. — Responde Darién.En el fondo de su corazón sabe que ella no lo está escuchando…Ella está completamente fuera de este mundo.—Si yo te dejo ir vas a ir corriendo a los brazos de ella, la única forma que tú te alejes de mi, esta vez es con los pies por delante. — le asegura la mujer con un brillo de locura en la mirada.—Ella no tiene nada que ver en todo esto, el problema, siempre hemos sido tú y yo, yo no puedo amarte. — Le responde Darién.—Si yo la mato, toda esa obsesión tuya por ella se acabaría, pero sabes una cosa creo que no es necesario llegar a esos extremos. — le responde ella y toma un sobre en sus manos mientras sonríe.—Lo que veras aquí seguro va a cambiar tu forma de pensar de ella. — Dice Alma c
—Al fin despiertas cariño, no sabes lo mucho que te he extrañado. — Susurra Alma depositando un beso suave en los labios.Darién se sacude con violencia, pero no logra quitársela de encima ¡porque está atado en la cama!, los recuerdos del secuestro invaden su menteApenas abre la puerta del avión y todos comienzan a salir— ¿Dónde están los autos que nos venían a buscar?— Pregunta el guarda espaldas viendo la desolación a su alrededor.—Lo siento mucho señor. — Dice la asistente poniéndose de rodillas ante Darién y comienza a llorar angustiada.— ¿Qué demonios te pasa? ¡No me has hecho nada!— Le responde Darién intentando ponerla de pie.—Lo hice por mi familia, lo juro. — gimotea…Nadie le da importancia.Cuando Darién va a abrir la boca caen todos los guarda espaldas que el tenia a su alrededor con un disparo en la frente.— ¿Qué hiciste?— le grita a su asistente, intentando cubrirse, para que no lo mataran, pero el no tiene idea que matarlo nunca fue el objetivo.Acompáñanos. — Le d
—Alexander ayúdame por favor.— Suplica apenas abre la puerta del director de la cárcel.—Creí que no querías nada conmigo.— Responde el con una media sonrisaQue a ella le encantaría borrar de una bofetada, no iría con el si no estuviese tan desesperada.—Lo he buscado por cielo mar y tierra por más de una semana, contrate a los mejores, pero no logro dar con el.— Le responde entre hipidos.—Si te ayudo, ¿Qué voy a obtener a cambio?— Cuestiona el, sin inmutarse por las lagrimas de ella.—¿Cómo puedes preguntarme eso?— Le responde con una pregunta indiganada.—Miranda yo no soy un estúpido, yo no hago nada de gratis, el que el aparezca a mi no me beneficia en nada.— Le responde el, poniéndose de pie y caminando hacia ella, como un león a punto de atacar a su presa.—Creí que me apreciabas, que eras un caballero.— Le responde ella, temblando.—Lo soy, ¿te estoy obligando a hacer algo que no quieras?— Cuestiona el, aspirando el olor que emana el cuerpo de ella, si toda despeinada y sin b
Último capítulo