Mientras ella se fue a arreglar, yo salí a comprobar que todo lo que había pedido estuviera listo. Lo bueno era que Antonella tardaría alrededor de una hora, y eso me daba tiempo de afinar los detalles. Terminé con todo y regresé a la cabaña para darme una ducha.
Me puse un conjunto blanco de ropa playera: pantalón y camisa de manga corta. Lo elegí a propósito, porque hacía juego con el vestido blanco de la misma tela que ella había comprado en el centro comercial. Sí, lo había planeado de esa manera.
Estaba emocionada porque esta sería la primera cita oficial que tendría con Luigi. Él me había dicho que me tenía una sorpresa y yo estaba nerviosa por descubrir de qué se trataba.
Quería arreglarme rápido, pero tenía arena en el cabello y tardé bastante en dejarlo limpio. Luego hidraté mi piel y me peiné en un recogido sencillo de lado. Después me maquillé y me puse el vestido blanco. Me quedaba hermoso, lo sabía.
Cuando terminé, me acerqué a Luigi y le di un beso. Este hombre estaba es