Luego de casi 8 horas de vuelo, Alejandro descendió del avión que lo trasladaba, subió a un elegante auto que iba custodiado por Leo.
Alejandro en esos 5 años, no había pensado en que su vida cambiaría de un momento a otro, pero la situación le indicaba que era necesario hacer aquello. Ya había cometido muchos errores, no podía seguir cometiéndolos, así que era momento de tomar las riendas de su vida.
- Alejandro, ya he pedido que busquen lo que me pediste. -dijo Leo con la vista puesta en el camino.
- Bien… Avísame cuando consigas un informe completo. -dijo Alejandro mirando por la ventana.
- ¿Me puedes decir qué es lo que buscamos en particular?
- Ni yo mismo lo sé, solo quiero quitarme una espina que traigo desde hace rato que la vi.
- ¿Crees que ella podría tener algo que ver contigo?
- Dilo con todas sus letras, ¿Creo que ella podría ser mi hija?
- Bueno, no quise sonar tan directo.
- Sí, eso es lo que pienso… ¿Sabes que cometí muchos errores en el pasado?
- Pero, ¿Acaso Serena n