El resto del día fue normal, hasta que recibí un mensaje de Matías, me estaba citando nuevamente en su departamento.
Era algo realmente extraño, los encuentro normalmente no eran tan seguidos, ¿acaso no le vasto con ayer?, porque me estaba citando nuevamente.Simplemente no entendía por qué me había citado de nuevo. Apenas habían pasado unas horas desde que estuve en sus brazos, desde que escuché de su boca promesas vagas de compensación, de premios si obedecía, de afecto disfrazado de control.---Al ser la hora del encuentro, me arregle un poco, ya sabía en que se basaban nuestros encuentros, así que no era necesario de arreglarme tanto para verlo.Salí de casa en un taxi, no quería que Javiera me llevara y viera cual era la parada de mi destino.Subí las escaleras de su departamento con el corazón acelerado. Mis pies avanzaban, pero mi mente dudaba a cada paso. ¿Por qué otra vez? ¿Qué más podía exigirme? Aún me dolía el cuerpo, aún tenía la sensación de