Aimunan
Mis padres ya sabían que me iría con Alexander, ya mi hermano había hablado con ellos, no tuve que explicarles mucho, lo cual agradecí por dentro.
Almorcé solo con ellos, compartimos como familia, me recordaron mis vivencias cuando era niña, pregunté sobre algunos amigos de mi infancia y recordamos lo hermoso que fueron aquellos días cuando el abuelo se tomaba "Las vacaciones " cuando realmente nos venía a buscar para ir a las prácticas del iniciación de los Pia. Quise preguntarles sobre su sacrificio para concebir a mi hermano, pero sentí que no era el momento y decidí dejarlo para esa ocasión especial.
Las horas pasaron y llegó la hora de irme.
Me acompañaron a la salida, mi madre no quería ir a despedirse de mí al aeropuerto, por lo que recibí su bendición antes de salir de casa, nisiquiera había podido ir a nuestra casa de la infancia, donde está nuestro antiguo hogar, nuestro verdadero hogar, en otra oportunidad quizás pueda ir. Supe que mi hermano lo había manda