Valeria, vestida hoy con un traje sastre en tono gris humo, irrumpió en la escena con una presencia imponente. Sus rasgos delicados, delineados por cejas y ojos exquisitos, reflejaban una mezcla de frialdad y belleza intimidante, generando una admiración temerosa.
La recepcionista reconoció rápidamente a Valeria, la flamante CEO de la compañía.
—Señora Ramírez, buenos días, —la saludó.
Poco después, una secretaria se acercó a Valeria y, tras un breve saludo, la guio hacia la sala de conferencias en el piso superior.
Los empleados de la compañía de cine y televisión ya estaban al tanto del cambio en la dirección, gracias a un correo interno.
La secretaria organizó eficientemente el horario de la reunión.
Valeria entró a la sala de conferencias y, después de ser presentada por la secretaria, conoció los nombres de los ejecutivos y los saludó brevemente.
Luego se sentó para escuchar los informes sobre el progreso de todos los proyectos de la empresa.
Enfocados en el desarrollo de la caden