(Narrado en tercera persona)
Thomas se levantó de la mesa y se fue sin decir nada más, al igual que Caleb quien, aunque se quedó, también guardó silencio porque ya había tomado su decisión y no pensaba retroceder.
—Descuida Caleb, no tienes que regresar con ella. —le dijo su madre satisfecha finalmente. A ella nunca le había agradado Olivia y siempre lo demostró abiertamente. —Esa mujer es una loca, la empresa de su familia está en total decadencia y su ayuda para tu carrera era prácticamente nula. Además, sin importar lo que tu abuelo piense, todos aquí sabemos que eres tan excelente en tu trabajo que mereces ser el CEO del grupo, y no hay una sola mujer en esta ciudad que esté a tu altura. —Añadió con altivez, elogiándolo como de costumbre.
—Mejor díselo al abuelo, como notarás para él soy una escoria. —Respondió Caleb hastiado.
—No le hagas caso, sabemos quién es su favorito. Pero, lo resolveremos de inmediato. Llamaré a mis contactos en la prensa y vamos a emitir un comunicado púb