POV Eva Davies
Sábado por la noche.
Al final, sí asistimos a la gala de Marcus Royce. Niklaus se queda en casa con la nana, y esta vez me aseguro de repetirle que, en ninguna circunstancia, puede dejar solo a mi pequeño. Mi paz depende de la certeza de que él está bien.
Cuando le pedí a Keleer que redactara un nuevo contrato para Paxton, creyó que había perdido la razón. Pero al final accede a mis peticiones, quizá porque intuye que no hay marcha atrás en mis decisiones. Vendo el cincuenta por ciento de mi proyecto, convirtiéndolo en socio igualitario de la firma.
El precio: quinientos millones de dólares, exactamente el monto que le fue arrebatado a la empresa de Erwin.
Paxton no tarda en responder, aprobando el informe con la fría rapidez que lo caracteriza. Desde el día en que firmamos, tengo un año exacto para recaudar ese dinero y comprarle de vuelta los derechos de mi proyecto. Sé que aceptará porque conoce la desesperación de los Hoffman por mantener su empresa a flote, y porqu