Jazmín negó con su cabeza aquella interrogante. Si bien, Ethan Whote le parecía un hombre atractivo y lograba estremecerla con sólo verlo, no podía dejarse llevar por ese tipo de emociones, no para ella que siempre había sido una chica comedida en ese tipo de asuntos.
A sus veintidós años, había sabido cuidar su reputación como mujer. Quizás el haber crecido junto a su abuela Teresa, la había hecho madurar desde muy pequeña. Saber discernir entre lo bueno y lo malo. Saber poner el límite y decir no, era algo que había aprendido e implementado con firmeza.
Así, cuando conoció a Jeremy en la universidad hace un año atrás, mantuvo con él una relación algo compleja. Él era un joven atractivo y ya estaba a punto de graduarse en la facultad de psicología. Físicamente Jeremy era un chico alto, apuesto, dos años mayor que ella, extrovertido y alegre.
Estuvieron saliendo por un par de meses, mas el carácter introvertido y maduro de ella, lo hizo aburrirse muy temprano, sobre todo cuando