Una posibilidad remota...
Preso de emociones intensas y del estrés, Ethan salió de la empresa rumbo al bar. Necesitaba despejar su mente y beber un trago.
Se dirigió hasta la barra, tomó asiento y pidió, al bartender, un vaso de licor.
—Un wiskhy doble, por favor.
Mientras bebía su trago, vio que a pocos metros de él, estaba sentado Mateo, su ex socio. Se veía muy diferente al hombre con quien muchas veces compartió. Su aspecto físico había cambiado significativamente, se veía muy descuidado. Llevaba una barba incipiente que cubría gran parte de su rostro, el cabello, largo y desaliñado, le caía sin forma sobre la frente, y la expresión apagada de sus ojos revelaba el caos emocional en que se encontraba.
Instantáneamente, Ethan recordó el informe que Stella le había entregado, en el que mostraba un supuesto fraude por parte de su socio. Una duda cruzó por su mente ¿Era aquel informe una de las tantas trampas y mentiras de su madre?
En ese instante, Mateo se levantó de su silla dispuesto a salir de aque