El brillo de las luces de Nueva York deslumbra la vista de Marina en el momento en que ella y Víctor bajan del taxi frente al hotel. El lugar es deslumbrante, con una fachada imponente decorada con miles de luces que parpadean en tonos dorados y plateados, anunciando que el Año Nuevo está por llegar. Marina sostiene la mano de Victor con firmeza, mientras sus ojos recorren el escenario a su alrededor.
—No puedo creer que esté aquí —murmura, maravillada.
Víctor sonríe, orgulloso de la sorpresa que había preparado.
—Esto es solo el comienzo, rubia. Quiero que esta Nochevieja sea inolvidable para los dos.
Dentro del hotel, el lujo es aún más evidente. Candelabros de cristal iluminan el vestíbulo, y un gran árbol de Navidad aún permanece decorado, con regalos ficticios debajo. Marina observa cada detalle con una sonrisa en el rostro, sintiéndose dentro de un sueño. Victor hace el check-in rápidamente, y pronto ambos son conducidos hasta la suite principal.
—Prepárate — dice él, abriendo l