Andrea no tenía nada más en el mundo excepto a su hija. Literalmente no tenía nada más. Traicionada y abandonada por su esposo, su vida era una lucha diaria por sobrevivir y ganar dinero para alimentar a su bebé. Y parte de esa lucha era trabajar para hombres desagradables que creían que podían aprovecharse de su situación. Sin embargo todo cambia cuando conoce al dueño de la empresa donde trabaja. Zack Keller era esa clase de hombre que solo se podía catalogar como huracán, llegaba húmedo y caliente y arrasaba todo a su paso. A sus treinta y dos años era un magnate de la industria deportiva, con una de las mayores agencias de representación de América, sin embargo su perfecto mundo se vino abajo después de descubrir en un mismo día que su novia estaba embarazada y que había perdido a su bebé a propósito. Por desgracia, Zack ya le había dado la buena noticia a su padre enfermo, así que era algo de lo que no se podía retractar. Cuando debe volver a los Alpes Suizos para pasar la Navidad con su familia, su vida se convierte en una desesperada carrera contra el tiempo para encontrar una familia “de mentiras”. «Aviso urgente: Magnate renta familia para estas Navidades» Lo que Zack no imagina es que encontrará la ayuda en una de sus empleadas, una mujer que está pasando por el más duro momento de su vida y aún así se niega a renunciar a su pequeña bebé. Un viaje de Navidad. Un hombre herido. Una mujer desconfiada. Una princesa de cinco meses. ¿Cuánto se puede fingir el amor antes de que comience a ser real? Aquí encontrarás cinco novelas: 1. Un bebé para Navidad. 2. Te voy a conquistar. 3. Una chica traviesa. 4 Una jaula para la reina. 5 Volver a creer
Leer másEl frío envolvía la pista, pero los entrenamientos del equipo continuaban sin cesar. Noemi sonrió al verlo hablar con los chicos antes de mandarlos a hacer otra ronda. Había sido un excelente competidor, pero era un coach muchísimo mejor.Noemi se acercó a la baranda de la pista con un termo humeante en las manos, y el rostro de Levi se iluminó de alegría al verla.—¡Hola cariño! Pensé que no trabajabas hoy —le dijo envolviéndola en un abrazo y dándole un beso—. Por eso me escapé para dejarte dormir.—Y no trabajo, por eso vine a traerte chocolate caliente para calentarte... lo que te dejes calentar —dijo sonriendo toda coqueta.Levi aceptó el chocolate caliente con gratitud y dio un sorbo. El cálido sabor se extendió por su cuerpo, brindándole una sensación reconfortante.—Gracias amor —solo tenemos un par de vueltas de entrenamiento y luego pasaremos el día juntos. ¿De acuerdo? —dijo Levi, haciéndole un guiño travieso.Quince minutos después los chicos habían pasado de nuevo frente
EXTRA. Te voy a conquistarLoan estaba decidido a sorprender a Danna con algo especial. Había planeado cuidadosamente cada detalle para crear un momento inolvidable para los dos. Con los niños quedándose con sus tíos por unos días, era el momento perfecto para llevar a cabo su plan.Con una sonrisa juguetona en su rostro, Loan condujo a Danna hasta el aeropuerto sin revelar su destino. Ella estaba emocionada por la sorpresa y se dejaba llevar por la intriga.—¿De verdad no me vas a decir a dónde me llevas? —preguntó finalmente cuando el avión privado despegó.—Nop, es sorpresa.—¿Y cómo planeas exactamente que yo no me dé cuenta de cuál es nuestro destino? ¿Eh?Loan sonrió, tirando de su mano para sentarla sobre su regazo y le acomodó un mechón rebelde de cabello detrás de su oreja.—Pues planeo mantenerte muy ocupada, pelirroja —respondió mientras acariciaba sus muslos, subiéndole el vestido con un toque sensual—. ¡Muy ocupada!Y tanto fue así que terminó rendida en brazos de Loan y
Tres años después.El sol brillaba radiante en el cielo mientras Zack y Andrea preparaban todo para un emocionante día de campo con todos los niños de la familia. Estaban entusiasmados por compartir momentos de diversión y risas al aire libre. Empacaron la comida, las bebidas y los juegos, asegurándose de que todo estuviera listo para el día.Finalmente, llegó el momento de partir. Zack y Andrea se subieron a la camioneta, con los niños ansiosos y emocionados en los asientos traseros. La risa y la alegría llenaban el aire primaveral mientras se dirigían hacia una de las montañas favoritas de Zack en Lucerna.Cuando llegaron, encontraron un hermoso lugar rodeado de naturaleza exuberante. Todos salieron a la hierba con emoción, desplegando mantas y tiendas de campaña. Los niños correteaban por el campo, jugando a la pelota y explorando los alrededores y las niñas construyeron un fuerte ¡donde por supuesto no iban a dejar entrar a los niños!El día transcurrió lleno de diversión y felici
El gran día había llegado: la boda de Anja y Milo. El aire estaba cargado de emoción y anticipación, no solo para la pareja, sino también para sus seres queridos. El lugar estaba decorado con hermosas flores y sillas dispuestas en filas para los invitados. La música suave y romántica creaba un ambiente mágico.El pequeño Niko iba vestido con un trajecito a medida, y esperaba ansiosamente el momento en el que acompañaría a su madre al altar, aunque todavía refunfuñaba porque no lo dejaban hacerlo montado en un perro para ser más grande.Cuando la música cambió, marcando el inicio de la ceremonia, todos los invitados se apresuraron a ocupar sus lugares y todos los ojos se volvieron hacia la entrada, donde Anja apareció, radiante en su vestido blanco, tomando la mano de Niko. Los invitados sonrieron al ver la hermosa imagen de madre e hijo caminando hacia el altar, pero no había nadie más emocionado que Milo en todo aquel lugar.Los esperaba con una sonrisa en el rostro. Sus ojos se ilum
La emoción y los preparativos estaban en pleno apogeo, ya que la boda de Anja con Milo se acercaba rápidamente. Era un momento especial y la familia estaba ansiosa por celebrarlo de una manera memorable.—¿Segura de que no nos vamos a meter en problemas? —preguntó Danna mirando a su suegra con un gesto significativo.—¡Hija, "problema" es mi segundo nombre! —exclamó la señora Luana levantando su copa con un trago que debía ser algo así como la versión alcohólica de la bomba atómica—. ¡Ellos dijeron: despedida de soltera en casa, y en casa estamos! ¡Yo ya hice la llamada!—Sí, mamá, pero lo dijeron porque no querían que saliéramos a ver stripers —se burló Chiara.—¡Pues por eso mismo hice la llamada! ¡Para que vengan los stripers aquí!Para hacerle una despedida de soltera a Anja, todas las mujeres de la familia se habían reunido en su casa. La casa estaba llena de risas, abrazos y una energía contagiosa.Anja estaba rodeada de su suegra y todas sus cuñadas y amigas de la familia. Las
Milo llevó a Anja en brazos hasta el baño, cuidando de mantenerla firme para que no resbalara en el suelo mojado de la ducha. Aun así ella apoyó la cabeza en su hombro y se dejó consentir por el agua tibia y los besos de aquel hombre. El agua caía sobre ellos, creando un ambiente de intimidad que a él se le antojó demasiado mágico.—Todavía no he escuchado una respuesta —advirtió Milo—. ¿No vas a decirme nada?—Una propuesta de matrimonio post sexo no se puede considerar una propuesta formal.Él sonrió de oreja a oreja.—Si quieres me arrodillo... pero si lo hago voy a tener la boca demasiado ocupada como para preguntar de nuevo.Anja rio sin poder evitarlo mientras tomaba su cara entre las manos y lo miraba a los ojos.—¡Eres un sucio, sexy, hermoso hombre! —exclamó.—Y y todos ellos se quieren casar contigo, así que respóndeme.Anja suspiró y se quedó pensativa por un momento antes de negar.—Todavía no.—Está bien, puedo esperar otro año —aseguró él—. Y otro y otro y los que hagan
Anja se había comprometido plenamente con su proceso de recuperación física. Dedicaba incansables horas a las sesiones de fisioterapia, trabajando arduamente para fortalecer su cuerpo y superar los desafíos que se le presentaban. A medida que pasaban los días, notaba mejoras significativas en su fuerza muscular y en su capacidad para moverse con mayor facilidad.Pero Pie Grande tenía razón, toda su vida no podía girar alrededor de eso, así que el trabajo en la institución la absorbía con la misma intensidad. Sin contar por supuesto con que Niko ocupaba toda su atención cuando llegaba del jardín de niños, y era el mejor terapeuta del mundo porque seguirle el ritmo era difícil hasta para Milo.Tres semanas después, la institución recibió a su primer niño. Era un pequeño de casi un año víctima de la venta de bebés. El equipo de especialistas de inmediato se hicieron cargo de cuidarlo y brindarle todo el amor y la atención que necesitaba hasta que pudieran reunirlo con sus padres otra vez
Milo levantó a Anja en brazos para llevarla hasta el auto, la acomodó en el asiento del copiloto y luego se sentó tras el volante listo para llevarla a casa. Tomaron el tráfico en silencio, pero él notó cómo uno de los dedos de Anja se movía sobre el botón de la ventanilla. La bajó para ella desde su lado y la muchacha suspiró al viento suave de la mañana.—Gracias —murmuró ella cerrando el puño—. Ya soy bastante dueña de mis manos pero todavía no tengo mucha fuerza.—Ya la tendrás, tranquila, mientras tanto vamos a casa a quitarnos este horrible olor a hospital —sonrió Milo, pero no pudo evitar notar la expresión triste y preocupada de Anja, como si algo la estuviera perturbando profundamente. Mientras conducía, decidió armarse de valor y abordar el tema.—Anja, nena, ¿cómo te sientes, en qué piensas? —preguntó Milo con suavidadAnja miró por la ventana durante un momento antes de responder con voz temblorosa:—No puedo dejar de pensar en las palabras de esa enfermera. ¿Y si es verda