Un traje blanco como la nieve, adornado con lentejuelas plateadas que recordaban a copos cayendo en pleno invierno. Varios cinturones elegantes y fluidos rodeaban la cintura, cuidadosamente cortados.
El conjunto no era ni demasiado recargado ni aburrido; todo estaba en su justa medida, complementando a la perfección los rasgos faciales y las proporciones del cuerpo de Dylan.
En ese momento, casi todos contuvieron la respiración, con la mirada fija en cada paso que Dylan daba sobre la pasarela.
Dylan caminó de un extremo a otro dos veces, para finalmente situarse junto a Alessia.
En ese instante, estalló un aplauso ensordecedor; todos quedaron profundamente impresionados por el talento en el diseño de Alessia.
En apenas veinte minutos, había completado el tema ‘invierno’, una tarea que parecía casi imposible, y lo había hecho de manera excepcional.
Incluso Ava, quien siempre mantenía una actitud crítica, no pudo encontrar ningún fallo que criticar en ese momento.
Nunca había creído que