Por desgracia, no habían podido verse en al menos un par de meses. En parte debido al trabajo de este y por otro lado el lugar en donde ella estaba en esos momentos.
—De hecho, si y es algo en verdad importante —aceptó, esperando sinceramente que pudiese ayudarla y es que era el único en quien podría confiar para hacerlo.
—Lo que sea solo tienes que decírmelo y lo aré, sabes que te debo mucho y aria lo que fuese por ti —le aseguró, convencido de que así sería; que no habría nada que se lo impidiera.
—Te lo agradezco y es justo por eso que decidí llamarte. Nunca te lo dije, pero el padre de mi hijo es un hombre muy rico y su familia es muy poderosa; he estado con ellos desde que di a luz. Por desgracia, creo que quieren quitármelo y no puedo permitirlo por ningún motivo; te aseguró antes moriría —le dijo, convencida de que así seria y es que por su hijo lo daría todo.
—¿Qué quieres que haga? —le preguntó con resolución y es que solo necesitaba que se lo dijera.
—Te enviare una direcció