El grupo, cansado pero decidido, se había reunido en la sala para debatir sus próximos pasos. El peso de las recientes revelaciones pesaba fuertemente sobre sus mentes, y el silencio opresivo de la casa parecía amplificar su angustia. Lucas, sentado junto a la chimenea, intentaba recomponer los fragmentos de su pasado, mientras Mathias continuaba analizando las grabados en las paredes. Alice y Léa intercambiaban miradas silenciosas, conscientes de que los acontecimientos los habían ligado inexorablemente a ese lugar.
Lucas respiró profundamente, alzando la mirada hacia el grupo. — Debo entender lo que ha pasado. Esos recuerdos… No puedo ignorarlos. Si esta casa y este lago están ligados a mi pasado, entonces mi familia podría ser la clave.
Alice, con los brazos cruzados, respondió en tono seco: — ¿Tu familia? ¿Quieres decir que todo gira en torno a ti? ¿Y nosotros, que estamos aquí solo para ayudarte a resolver tu enigma personal?
Léa intervino antes de que Lucas pudiera responder, co