Aún tenía que conocer a la adorada tía Marie, pero eso iba a tener lugar muy pronto. Habíamos decidido que era hora de presentar a las familias en una cena en mi casa. Mi padre, la tía de Raquel, Gabrielle, Clarkson, Neil y Elaina componían la corta lista. Mis hermanos y mi madre no se encontraban en casa. Lo habíamos hablado y creíamos que ya era hora de compartir con todos ellos lo que nos estaba sucediendo y las posibles amenazas hacia Raquel. Todos eran muy importantes y necesitaban saber lo que había en juego. Raquel era demasiado importante para arriesgarme a estas alturas, y todos los involucrados ya conocían su pasado de todas formas.
-Bueno, estoy deseando conocerla. Parece que tiene predilección por ti -volví a mirar el reloj-. No me puedo creer lo que ha hecho Ivan, mira que no presentarse... Qué maleducado.
-¿Por qué no lo llamas? -sugirió Raquel.
-Eso sería una pérdida de tiempo. Nunca contesta al móvil. Dudo que ni siquiera encienda el maldito aparato.
-¡Oh, mierda! -Gab