13

Santiago tomó las bolsas y llegó justo a tiempo para ayudarla a bajar de la camioneta que era un poco alta. Ella le agradeció, cambiando de mano los paquetes que sostenía para recibir la que él le ofrecía. Tomó una gran bocanada de aire y caminó hasta el porche de la casa. Abrió la puerta de entrada y lo hizo pasar. Santiago observó con atención el espacio que se vislumbraba. Todo parecía colocado en su exacto lugar, muy bonito.

―¿Te estás mudando? ―dijo curioso, al ver una buena cantidad de cajas en la entrada.

―No, son solo cosas que se van de aquí.

Christina lo hizo pasar hacia la sala donde estaba la mesa de comedor, así como varios libreros, los cuales estaban atestados de libros.

―Ven te ayudo —dijo Christina intentando quitarle las bolsas, él no se lo permitió colocándolas en la mesa de la cocina. ―De verdad muchas gracias, en serio no tenías por que molestarte.

―No tenía, pero quise hacerlo ―dijo interrumpiéndola, mirándola de una forma, que la pobre no tuvo más remedio
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App
Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App