La vida para Ximena Medina no es fácil, mala relación con su familia y pésima socializando. Que pasara cuando se une a otra familia a pero claro, no a cualquiera...una familia de la mafia. ¿El amor cambiará su vida para bien o para mal? Ximena aprenderá a convivir con un chico que no quiere recibir ayuda. Luke descubrirá que todas sus acciones tienen consecuencias y aprenderá a lidiar con cada una de ellas por amor. Un secuestro, un amor, una nueva vida, nuevas amistades y, muchas cosas en juego. Una historia en la que el amor lo es todo.
Leer más●Ximena:
Ayer fue mi cumple, cumplí mis 18 añitos. Fue una gran fiesta, así que hoy tocaba limpiar. Después de terminar mi mamá me pidió que sacará las bolsas de b****a, y así lo hice. Ellos se encontraban cada uno en sus cuartos. Yo salí con las bolsas de b****a cuando sentí la sensación de que alguien me observaba. No le tome importancia y volví a entrar por las últimas bolsas de b****a, pero esta vez senti que alguien se acercaba.
—Hola preciosa. —dijo un hombre mayor, de unos 35 años, tenía una barba negra y en las puntas de ella se tornaban blanca.
—¿Quién eres tú? —pregunte muy nerviosa, sentí como mis piernas temblaban pues otro hombre se acercaba. Nadie estaba pasando por ahí, mi familia no me escucharía gritar, así que eso era inútil.
—Eso no te importa niñita. —Yo seguía pensando que haría, pero mis pensamientos fueron interrumpidos cuando sentí un pañuelo en mi nariz, uno de los hombres me ponía el pañuelo mientras que el otro me sostenía con un fuerte agarre para que yo no me fuera. Poco a poco fui cayendo, me sentía débil, pero no me había desmayado por completo, no todavía.
Con la poca fuerza que me quedaba, pude alzar mi cabeza para ver como un camioneta negra se acercaba a nosotros. Uno de los hombres me cargo y me metió en ella. Al entrar caí rendida en el asiento, solo pude escuchar como uno de los hombres hablaba por teléfono.
Llamada
—Si Jefe, ya la tengo.—
—Si señor, nadie se dio cuenta.—
—Ya nos estamos dirigiendo hacia allá.—
—Si Jefe, allá nos vemos.—
Fin de llamada.
No pude más, solo sentí como poco a poco mis ojos se cerraban, como mi cuerpo caía por completo en el asiento. No sabía a donde me dirigía, ni sabia el porqué yo, no sabia que me harian. Solo sabia algo...tenía que ser fuerte.
Desperté pero me hice la dormida, sentí como la camioneta se detuvo, los hombres salieron de ella y uno de ellos me cargo, no sabia a donde me llevaba, solo me hice la que estaba en un sueño profundo.
Estos idiotas deberían de revisar mejor que la persona de verdad este dormida. Sentí como me acostaron en una cama. Escuche la puerta cerrarse, y solo para asegurarme, seguí haciéndome la dormida por unos minutos.
Una vez que me asegure de que estaba sola, abrí lentamente los ojos. Estaba en una cuarto pequeño; no entendía que estaba haciendo ahí o quienes eran esos hombres.
Fue cuestión de varios minutos cuando una señora entro, parecía una sirvienta.
—Hola señorita, que bueno que ya despertó. —me dijo de una manera muy amable, me puse nerviosa, ¿quien era ella y que estaba haciendo ahí? Yo solo seguían sentada en la cama con muchas preguntas en mi cabeza.
—¿Quién es usted? —pregunte nerviosa, pero necesitaba respuestas.
—Discúlpa mis modales, soy tu nueva sirvienta y yo me encargaré de ti. —cuando dijo eso me paralice, ¿sirvienta? ¿Cómo que una sirvienta? ¿Por qué?
—¿Mi sirvienta? —pregunte confundida, y se que mi cara lo demostraba. Ella solo me miró y me sonrió.
—Ven vamos..tengo que prepararte. —la forma en la que me hablaba me traía paz, me sentía tranquila.
—¿Prepararme? ¿Prepararme para que? —le pregunte confundida.
Ella no respondió, solo entro al baño y me preparo la tina, cuando entre y mi piel toco el agua, se sintió muy bien; el agua estaba caliente, pero no hirviendo. Al salir me envolví en una bata; ella ya me había preparado mi ropa, me pidió que me vistiera, yo solo obedecí.
Era un lindo vestido, con los hombros descubiertos, la falda iniciaba desde mi cintura, era algo apretado lo que hacía que me resaltarán mis curvas. La falda llegaba hasta un poco arriba de mis rodillas; no suelo usar muchos vestidos pero apesar de eso, me gustó como me quedo este.
Solo había un pequeño problema...¿Por qué me estaba alistando?
Empezó a peinarme, un peinado sencillo, unas hermosas trenzas a los lados sin agarrar todo mi cabello, dejando que la mayoría de mi cabello estuviera suelto. Hizo unas pequeñas ondas y después empezó a maquillarme, me hizo un maquillaje natural, y eso me encantaba pues casi no me gusta el maquillaje.
—Bien, ya estás lista. —me dijo con una sonrisa en su cara.
—¿Ya me va a decir el porque me estaba alistando? —pregunte, no se me ocurría el porqué ella me alistaba.
—Lo siento, no puedo decirte pero pronto lo sabrás, solo tienes que esperar a que las demás terminen de alistarse. Mientras te llevare a otra habitación. —dijo con una tranquilidad impresionante, como que las demás, otra habitación?
—¿Las demás? —pregunte con curiosidad.
—Si, después las conocerás, mientras te llevare a la habitación. —me dijo, yo solo obedecí, por primera vez salí de esa habitación.
La casa era muy hermosa y se veía muy lujosa, con cada paso que dabas veías algo increible; es muy grande y estoy completamente segura de que si yo camino sola por toda la casa me perdería. ¿Pero que estaba haciendo yo ahí?
●Luke:Estamos todos en casa. Mis hermanos y mi padre, todos reunidos para comer en familia. Solemos tener la costumbre de cada semana reunirnos en casas divergentes y convivir un poco en familia. Esta semana tocó en nuestra casa.Todos los niños corriendo por el patio, las chicas en una gran mesa platicando mientras que mis hermanos y yo hacemos la comida. Cada experiencia es divertida y graciosa con mis hermanos.—Papá, Damián no me deja jugar con ellos porque dice que es un juego de niños. —bajo mi mirada y puedo ver a mi princesita, tan solo dos años menor que Damián, me ve con ojos tristes por lo ocurrido y al ver a los niños puedo ver como juegan a las peleas——Ven princesa. —ella toma mi mano y vamos con los niños, me acerco a Damián y él me mira con una sonrisa— Hijo, ¿por qué no d
●Ximena:Ya ha pasado un año desde que me case con Luke. Ambos intentamos disfrutar de nuestra vida lo más posible, salir de viaje, pijamadas, fiestas con familia y entre muchas cosas más.Hace unos días me empecé a sentir mal, unos mareos y retraso menstrual. Me asuste y mucho así que me apresure a ir al hospital. Lo recuerdo bien, fue un día que Luke y yo no nos vimos por trabajo así que aproveche en ir. Me hice un estudio y lo recogí más tarde. Antes de llegar a casa me apresuré a abrir el sobre y cuando lo leí, abrí muy grande mis ojos.Positivo.Estaba embarazada. Hace mucho, como unos meses atrás, Luke me había dicho que quería un hijo, yo le había dicho que sería complicado pues para eso tendría que alejarme del trabajo por su protección y cuidado. Él se desilusi
●Luke:Hoy es un día muy importante, hoy le pediré a Ximena que se case conmigo. Tan solo han pasado dos años desde que nos mudamos y empezamos a vivir juntos.Ella es la que quiero a mi lado cada día de mi vida, hacerla feliz y darle todo mi amor. Con ella quiero tener hijos y verlos crecer. Quiero darles lo mejor de mí, ser un buen padre y darles la mayor atención como hubiera querido que mi padre me la diera.Cuando le dije a mi papá que me quería casar con Ximena me dijo muchas cosas...Hace unos días...Voy dirigiéndome a casa de mi padre, hace poco se mudó con Mariangel a una casa pequeña y acogedora. Estoy por contarle que quiero casarme con Ximena y estoy tan nervioso que quiero recibir unos consejos de mi padre.—Hola hijo. —me saludo una vez que abrió la
●Ximena:Cuando les contamos a los chicos que nos mudaríamos se alegraron mucho, tanto así que algunos se pusieron a pelearse por nuestro dormitorio pues es un poco más grande que los demás.Nuestra casa cada vez estaba mucho mejor. Luke se tomó el tiempo junto conmigo para ver sobre los muebles y toda la decoración de la casa. Todo estaba increíble y el más contento por mucho era Max pues tenía un gran patio y porque también en un paseo, se encontró a una hermosa perrita doberman.Ya hasta tiene novia el Max.Hace unos días terminamos de instalarnos y eso me emociona y me llena de felicidad pues al fin estamos en nuestra propia casa. Un espacio solo para nosotros pero que habrá momentos en los que compartiremos esto con toda la familia.También Luke es oficialmente el Jefe de la mafia, eso benefi
●Luke:Ximena por fin entendió a lo que se refería mi papá y ahora era ver que haríamos.—¿Y entonces? —nos preguntó mi papá— ¿Van a querer irse o se van a quedar? —voltee a ver a Ximena y nos miramos.Nos mirábamos como si nos estuviéramos comunicando por la mente, pero no era así, en realidad tenemos un código en nuestros parpadeos. Algo así como un parpadeo es un sí, dos parpadeos lentos es un no y dos parpadeos rápidos es un no sé.Recibí un no sé de parte de ella y yo le tire otro no sé, era difícil, podíamos ir a vivir juntos y tener una gran privacidad o quedarnos aquí con la diversión y las locuras de todos.Mire a mi padre y me quede pensando.—¿Ustedes se quedará
●Ximena:Ya pasó una semana, fue la mejor de todas. Luke me llevó a conocer todo Egipto, se tomó su tiempo investigando la ciudad para poder pasarla mucho mejor y que pudiéramos disfrutarla al máximo.Conocimos mucho de la historia de ahí, pero como todos sabíamos, debíamos volver a casa. Esperemos que la casa no se encuentre patas arriba.Subimos al avión, un viaje un poco largo pero tranquilo. Luke y yo hablamos un poco sobre lo que conocimos, las pirámides, las esfinges, sobre los faraones y todo eso. Nos entretuvimos hablando de eso que no nos dinos cuenta del tiempo trascurrido.Ya habíamos llegado.Bajamos y ahí se encontraba el carro de Luke, nos dispusimos a subir para ir a casa. Estaba muy feliz de volver a ver a todos; iba viendo todo el camino feliz y de manera tranquila.<
Último capítulo