Capítulo 122. El mismísimo demonio
Alexia se quedó pensativa y su corazón latía más rápido de lo normal al escucharlo decir que le gustaba, sin embargo, estaba convencida de que Matías aún sentía algo por Olivia, solo que en ese momento estaba decepcionado por todo lo que había descubierto de ella.
Eso significaba que no podía ilusionarse ni mucho menos creer en aquella confesión de amor. Por eso, de inmediato, lo rechazó y se marchó, dejando a Matías solo, el cual estaba decidido a convencerla y demostrarle que lo que le había dicho era verdad.
Al verla entrar en la cabaña, él sonrió con determinación, pues pensaba perseguirla y conquistarla hasta que aceptara su amor, pero antes de eso, sabía que debía buscar a Luciana y disculparse por todo el daño que le había causado.
Cuando la encontró, su cuñada estaba junto a Maximiliano, y por lo que veía, a su hermano no le había ido nada mal al pedir perdón.
Matías se acercó a ellos, se excusó por interrumpir y pidió hablar un momento con Luciana; sin embargo, Maximiliano, l