Parte 1: “El antiguo señor”
En una época perdida en el tiempo, antes de las guerras y los pactos oscuros, existía un hogar sumido en sombras. Allí, el miedo y el amor se entretejen de manera inexorable, envolviendo a nuestra madre, la mujer más pura de la región de occidente, en una existencia de sufrimiento que ella llamaba hogar.
Narrador (Varek):
El último de nosotros tres, Sariel, era el más amado por nuestra madre. Su nombre, elegido con devoción, significaba "Mandamiento de Dios". Nuestra madre, una mujer fuerte y decidida, siempre defendió nuestra existencia frente a un padre que solo veía en nosotros herramientas para sus oscuros fines.
Pero incluso la fortaleza más férrea tiene sus límites. Con el tiempo, la tristeza y el descontento la consumieron. Cuando llegó su hora, nos dejó con una última promesa, susurrada mientras besaba nuestras frentes:
"Varek, no dejes que nada malo les pase."
Esa noche, mientras su aliento se desvanecía en un sueño eterno, nuestra condena comenzó