Para los ojos del mundo, los hermanos Mulder tienen la vida soñada, pero desde pequeños la rivalidad que existe entre ambos los ha separado. Más, con la repentina desaparición de sus padres se verán obligados a tener un cambio radical en sus vidas. Nicolás, dejando de lado sus lujos tendrá que convivir con una realidad que nunca pensó enfrentar, así como un amor prohibido que lo hará encontrar su verdadera identidad. Thiago, por su parte, en medio de los lujos y el poder, descubrirá que el amor verdadero siempre ha estado a su lado. Sin embargo, deberá elegir entre la felicidad y el perdón o la soledad y la venganza. ¿Podrán los hermanos dejar de lado sus diferencias y trabajar en equipo para descubrir el quiénes están detrás de la destrucción del imperio Mulder?
Leer másVeintisiete años atrás
A las afueras de la ciudad en una habitación vacía y oscura, Sonia, pierde la vida sosteniendo la mano de su amado luego de dar a luz a un saludable bebé, que en ese instante es alimentado con leche de fórmula en un pequeño biberón.—Perdóname por ocultarte su existencia —lo mira con dulzura—pero, no quería entrometerme más en tu matrimonio.—No hables, por favor —Pide Alejandro.—Ya no hay tiempo para mí, lo sabes —expresa perdiendo el aliento.— ¡Por favor! Resiste un poco más.—Mi vida nunca ha sido fácil, pero nunca he sido más feliz que cuando supe que tendría un bebé tuyo. Ahora puedo irme en paz.—No digas eso, nuestro hijo te necesita. Yo te necesito.—Solo necesita de su padre —acaricia su mejilla secando sus lágrimas— no quiero entregárselo a un extraño. —Deja un pequeño respiro.—Sonia…—No digas nada, solo prométeme que lo cuidarás y lo amarás como me amaste.—Lo prometo.Sonia sonríe cerrando los ojos, su mano deja de hacer presión y cae de golpe sobre la cama. La mujer anciana que atendió el parto clandestino, se acerca con el bebé en brazos para entregárselo a su padre. Luego saca algo de su delantal y lo coloca sobre su colchita; era una cadenita de plata con una presea en forma de la letra T.—Quería que lo llamara Thiago. —dice con voz ronca la mujer —No sé si sea importante para usted— suena un poco indiferente.— ¿Usted la conocía?—No, solo soy la comadrona de mujeres como ella. Hago el trabajo sucio, como ustedes los ricos dirían.—¿Entonces, Sonia ha estado sola todos estos meses?—La vida es dura, pero tuvo la suerte de toparse en su camino. Ahora todos ya cumplimos con el propósito del día. Creo que debe irse a casa, el niño necesita alimentarse.— ¿Y… que pasará con su cuerpo? No puedo dejarla aquí.—No debe preocuparse por lo que le suceda. Ya Sonia se preparó para este momento — Empieza a ordenar el lugar. —Solo ocúpese del niño y olvídese de este lugar, ¡Olvídelo todo! Es lo que ella quería.Alejandro abrazando a su pequeño, mira el cuerpo de su amada amante por última vez antes de dar la media vuelta, no solo para dejar atrás el pasado, también para enterrarlo definitivamente y empezar uno nuevo al lado de su pequeño Thiago.Subiendo a su auto conduce por la carretera acariciando con la mano derecha a su pequeño que ahora duerme. Con el corazón temblando ve correr las horas lentamente y la oscuridad del lugar parece advertirle de un terrible destino.Para cuando llega a casa, Geraldine, su esposa se encontraba en la alcoba preparándose para dormir. Entonces el llanto de un recién nacido en el pasillo detiene su corazón. Con el silencio profundo de la casa, era inevitable no diferenciar el llanto de ese pequeño bebé.Sobresaltada se aleja de la cama y mira la puerta de la habitación abrirse y el rostro de su esposo no desmiente lo que tanto ha temido. Está sudoroso, tiene manchas de sangre en su ropa y ese bebé en sus brazos explica algunas cosas.Alejandro se acerca despacio y sin pronunciar palabras se arrodilla ante su esposa que ya imaginaba el final que tendría el romance fugaz que vivió su marido con aquella mujer, pero no se esperó escuchar el desenlace de su historia.—Perdóname Geraldine, he vuelto a fallarte y no sabes cuánto me arrepiento, no me opondré si decides abandonarme. Te he decepcionado tantas veces. — Llora con nostalgia.Ella se inclina para ayudarlo a ponerse de pie. Luego toma al bebé entre sus brazos y mirándolo con dulzura acaricia su pequeño rostro.—Has hecho bien, amor. — ahora lo mira—Junto a nosotros tendrá lo que necesita.—¡Lo dices en serio, cariño! No sé qué hice para merecer a una esposa como tú. No me siento digno de mirarte siquiera. —deja correr sus lágrimas.—Fue una época muy difícil para nuestro matrimonio. Te perdoné hace mucho y no te digo que volvamos a empezar, porque ya lo hicimos, solo hay que seguir en el mismo sendero.Con un fuerte abrazo se inicia el nuevo comienzo. Y semanas después, ya no en España, sino en Perú, ahora de la mano del nuevo miembro de la familia, Thiago Mulder.Todos ya conocían de los fracasados tratamientos a los que se había sometido Geraldine para quedar embarazada, así que adoptar era mejor opción que todos celebraban. Más, para Eugenio Mulder eso era detestable, inconcebible, un niño cualquiera nunca podría llegar a ser tan digno como para llevar sobre sus hombros una de las empresas más importantes del mundo.—Pueden decir lo que quieran, ¡ya saben cuál es mi opinión! pueden educarlo y vestirlo de la seda más fina, pero por sus venas solo corre sangre indigna. ¡No es un Mulder, punto final! Y mientras yo siga vivo, jamás será considerado en el testamento de la familia.Un pequeño secreto empezó a hacerse grande y mientras Thiago crecía llenando de amor y orgullo a sus padres, para su abuelo eso nunca sería suficiente.Entonces llega el milagro, la señora de Mulder queda embarazada y tras sumos cuidados da a luz a un varón, que se convierte en el orgullo del abuelo Eugenio, quien lo nombra Nicolás en honor a su padre. Por supuesto que su preferencia y halagos no pasa desapercibida, haciéndolo un niño mimado y presumido; y con el correr de los años el rencor que tiene por Thiago alimenta la rivalidad entre los hermanos.Después de que los abogados de la familia Mulder trabajasen sin descanso en la apelación de la condena, Thiagologra reducir su sentencia a ocho años de prisión, de los cuales cuatro lo haría en arresto domiciliario. Para ello la familia tuvo que pagar una cuantiosa suma de dinero, pero como dijo el abuelo.“El dinero va y viene, y este porcentaje es recuperable, lo que no regresa es el tiempo y ya hemos perdido mucho siendo una familia de apariencias, ahora que tenemos la posibilidad de empezar de nuevo, lo haremos”Sin duda, lo mejor para Eugenio fue aceptar sus errores, pedir perdón y perdonarse a sí mismo. Y la llegada del nuevo miembro de la familia Mulder entrega esa luz de esperanza y cambios para todos. Para empezar, Elena se mudaala mansión a petición de la familia, para que pueda tener los mejores cuidados durante el embarazo y mayor acceso a las visitas de su amado.Su padre, Javier inicia un nuevo proyecto e
Nicolás y su abuelo se preparan para dejar Lima e ir a España. Con pesar se despide de sus padres, resignado a su destino. Ha perdido a la mujer que ama y quizás cuando regrese e intente buscarla, ella ya este con otro.—Cambia esa cara que no estás yendo a un velorio. —dice su padre.—Así me siento. —Responde él con tristeza.— ¡Hijo! ¿Hasta cuándo estarás así?—Quizás hasta el último segundo que tenga de vida. —Responde bajando la mirada. —La amo y nadie lo entiende, solo juzgan y señalan como si el amor, fuese algo malo.— ¿Así que no es un capricho? —interrumpe su madre.— ¿Hasta ahora lo dudan? —pregunta melancólico.—Para serte sincera, ¡lo hice!
Días despuésLa prensa no ha cesado con sus especulaciones tras la negativa de la familia para referirse sobre el tema más sonado del año. Ahora queNicolásy suabueloserán dados de alta la prensa estámásamotinadaque de costumbre en la clínica.Ha tenido que salir al frente el abogado Ávila para frenar un poco la desesperación de los medios.“Después del juicio, la familia brindará una conferencia de prensa para responder todas sus preguntas. Por el momento, es todo lo que tengo que decirles.”Nicolásse prepara para dejar el centromédicoesa mañana, cuando recibe una terrible noticia, incapaz de poder asimilar.Su abuelo y sus padres han elegido que él viaje a España después del juicio para que aprenda elmanejode la empresa y con la ilusión de que tomase experiencia. Aunque Nicolás no lo vio de esa manera.—No importa como
No paso mucho para que los cinco abogados de la familia llegaran a la comandancia y enmudecieran al mundo con ello; pues, nadie esperaba que llevaran la defensa del mayor de losMulderluego de lo ocurrido ¿Qué estaba pasando alrededor del imperioMulder? ¿Qué es lo que no sabía el mundo?“Existen muchas cosas que aún no desciframos, primero; nos hacen creer que los señoresMulderhan muerto, para luego reaparecer en este misterioso secuestro queadeja dos heridos y aThiagocomo único responsable del atentado de su hermano y abuelo. Y ahora sorpresivamente, los mejores abogados de la familia aparecen para defender al acusado. Hablo por todos, cuando les digo que ¡necesitamos respuestas!”Con esos últimos sucesos, la prensa informaba en vivo y en directo desde las afueras de la comandancia, exigiendo respu
Minutos antesLa puerta se abre e ingresa EugenioMulder, con esa misma frialdad que lo caracterizaba mira aThiagoy cierra la puerta tras él. Se acerca despacio echa un rápido vistazo al lugar, observando a la pareja amordazada y atada en unas sillas en la sala. A pesar de que en sus ojos se nota la furia reprimida, mantiene la calma.— ¿A qué se debe todo este circo?—Hola, abuelo también me da gusto verte.—No soy tu abuelo, maldito Imbécil. — Expresa con desprecio, sintiendo que su corazón se parte a la mitad.— ¡Si! Ahora recuerdo de dónde le viene lo arrogante a Nicolás. —Le apunta con el arma haciendo detener sus pasos.—La policía está en camino, así que lo que tengas que hacer, hazlo pronto. De todos modos iras a la cárcel o al infierno, ¡Maldito necio!—Bueno ya que lo pones de ese modo, nos vemos allá, querido abuelo.Le dispara fríamente en el pecho haciéndolo caer de go
Javier Montero intenta por todos los medios, que la policía siga el GPS de su hija y vaya en su auxilio porque cree que está en peligro en manos deThiago. Por supuesto que su palabra no tiene el peso suficiente para iniciar una persecución contra unMulder. Todos saben el lío grande en que pueden caer si se atreven a abusar de su autoridad, contra ellos.Aunasí no quiere mostrar el mensaje porque sabe que hay cosas que no puede explicar sin salpicarse de mierda, pues todos sospechan de su participación en ese gran embrollo bajo la mesa de la empresaM&B. Perdiendo unas horas entre oficina y oficina empieza a entrar en pánico, está por irse solo cuando aparece el detective Gutiérrez, contacto deThiagoen la comandancia y encargado de liderar las investigaciones en la empresa de modaM&B.—¿Cu
Último capítulo