33- Vulnerabilidad de Elyria.
Gregor giró lentamente la cabeza.
—Creo que ya lo pensé lo suficiente. Mi instinto lobuno me arrastra hacia ella; nunca antes había sentido algo así. Y mi lobo nunca se ha equivocado.
Ewan apretó los dientes. Sabía que discutir con su alfa en ese estado era peligroso, pero no podía callar.
—Estás actuando impulsivamente. Ya está nevando, no tenemos manera de conseguir los suministros sin el apoyo de la princesa. Si eliges a la humana ahora, Mairen nos abandonará.
Gregor colocó una de sus manos, aún convertida en garras, sobre el hombro de su beta.
—Piensa en esto, Ewan… algo no cuadra aquí. Si esa princesa realmente quisiera ayudar, si en verdad tuviera los recursos que dice, habría sacado su tarjeta bancaria desde el primer momento en que mi madre pidió ayuda. Pero no lo hizo. Su vacilación me dice que no tiene dinero.
Ewan se quedó paralizado, y mientras sus pensamientos chocaban unos con otros. Observó a Gregor alejarse, sintiendo un escalofrío recorrer su espalda.
—Estamos arruina