76- Segunda parte del epílogo.

Gregor frunció el ceño.

—¿Te duele? ¿Mucho? Vamos a tomar aire, amor —dijo, ayudándola a levantarse.

Caminaron abrazados por el estacionamiento iluminado, y Gregor la rodeaba como si pudiera protegerla de cualquier dolor con sus brazos.

—Inhala, exhala, amor… repite conmigo… —le decía mientras él mismo era quien hiperventilaba.

—¡Eres tú el que necesita respirar, no yo! —rió Elyria a carcajadas, abrazándolo con cariño—. Estoy bien, tontito… solo necesito recostarme un poco. Vámonos a casa.

Pero apenas subió a la camioneta, un sonido húmedo la interrumpió.

Elyria se quedó inmóvil.

—¡Gregor… rom… rompí fuente! ¡Estoy teniendo contracciones! ¡Ahhhh!

—¡¿QUÉ?! —Gregor casi se cae de la silla del conductor—. ¡¡¿CÓMO QUE AHORA?! ¡¡¡NO TENEMOS SANADORES!!!

Ethan salió corriendo como si tuviera veinte años menos. Cloe gritaba instrucciones mientras Thalia entraba en modo general militar. Nadie sabía qué hacer.

—¡Al hospital! ¡Al hospital humano! ¡YA! —gritó Ethan.

—¡¿Un hospital humano?! ¡Va
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App
capítulo anteriorpróximo capítulo

Capítulos relacionados

Último capítulo

Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App