REY DE OROS. CAPÍTULO 39. Una prueba encubierta.
REY DE OROS. CAPÍTULO 39. Una prueba encubierta.
Damian estaba cruzado de brazos, con los labios apretados y los ojos chispeando de rabia contenida. Se podía sentir la electricidad en el aire, como si el circuito mismo contuviera la respiración ante lo que estaba a punto de estallar.
—¡Eso es una mentira! ¡Estás insinuando que mi madre no sabe quién es mi padre! —exclamó con esa voz que parecía un trueno a punto de explotar, y que en cierta forma sí se le pareció mucho a Alaric.
Damian se inclinó hacia ella, dejando escapar un ligero temblor en las manos que delataba su nerviosismo. Y Costanza lo miró, sentándose en las gradas con paciencia y apoyando los codos en las rodillas.
—¿Y para qué crees que Alaric le pidió a tu madre una prueba de ADN, eh? —preguntó, levantando una ceja mientras inclinaba la cabeza hacia un lado, como si estuviera examinando una pieza de rompecabezas difícil de encajar—. ¿Por diversión? ¿Para practicar su caligrafía en el formulario? Si estuviera seguro de q