ABBY KING
Me coloco algo de rímel para alargar más mis pestañas. El cabello me lo dejo suelto y hago un poco de hondas.
Ciertamente no tenía ganas de salir y mucho menos ir a una fiesta, pero Cloe insistió y no me pude negar a su petición. Ahora entiendo a mi hermano.
No se le puede decir que no a la dama de la mafia de Estados Unidos.
He optado por colocarme un vestido largo de seda blanco, la tela se amolda a mi curvas. Miro mi reflejo en el espejo, admiro la belleza que poseo, la cual usare para obtener mi objetivo.
No me importa lo que use pero Stef será mío. Intuyo que estará en la fiesta.
Me volteo observando el escote en la espalda. Casi rosa mi trasero pero es así como me gusta. Los pendientes largos van a juego con el vestido.
Muevo mi cabello y cuando creo que ya estoy lista salgo de la habitación. Todo va a salir bien, me digo a mi misma. Ahora estoy con mi hermano, nada malo puede pasar.
Desciendo por las escaleras hasta toparme con la sonrisa de Cloe.
Mi