Dos días antes de fin de año – 2009

New York

Cristina

Pudimos convencer a nuestros clientes antiguos de seguir trabajando con nosotros. Poco a poco, la empresa se estabiliza y dejo de recibir los anónimos que nos amenazaban. Sin embargo, no puedo dejar de preocuparme por lo que encontraron los detectives de la policía que investigan el accidente de mi hermano: la mafia rusa detrás de todo. Roger y su amigo del gobierno siguen esperando noticias de la esposa de Hanz Zimmer, con la esperanza de aclarar dudas que aún no desaparecen.

Mientras tanto, estoy reunida con Amanda, quien me habla de sus planes para el próximo año.

—Amiga, ¿qué opinas? —pregunta, jugando con su taza de café—. Estuve pensando en invertir parte de mi fortuna, pero no logro decidirme.

—Amanda, ¿qué tienes en mente? —respondo, inclinándome hacia ella, con la curiosidad reflejada en los ojos—. Dime tus ideas.

—Quiero usar parte de mi fortuna, Cristina. No cuento con mi padre ahora… Sabes que, por la demanda que ustedes