Pasión en obrasES

Mi nombre es Sofia Gutiérrez - Alarcón, soy arquitecta, tengo 29 años trabajo en la firma multinacional de arquitectura KAPLAN desde hace tres años.

El CEO de la empresa, Francisco Legnani me trae loca desde el inicio en la empresa, fue él quien me contrato y el cual enloqueció a mis hormonas. Cuando vean su foto van a entender el porque.

Hoy me vestí pensando en este CEO que me vuelve loca de remate y pensando en salir después del trabajo a tomar unas cubatas con las locas de mis amigas Juli, Maru y Eva.

Las cuatro somos más que amigas, somos hermanas y siempre hemos estado las unas para las otras. Pasamos siempre que nuestros trabajos lo permiten, nuestras vacaciones juntas, somos solteras y nos divertimos a lo lindo. Nuestro último viaje juntas fue a Grecia. Todas sabemos lo que le pasa a la otra, solo con mirarnos.

Parece que Francisco huele los problemas, porque vibra mi móvil y veo que es el jefe gruñón.

- ¿Hola?

- Sofía, necesito hablar contigo, en 10 minutos te quiero en mi oficina.

- Buen día jefe, creo que no dormí con usted como para que me llame y ni siquiera me salude. Otra cosa, estoy en el centro en una de las obras y hoy no vuelvo a la oficina. Si quiere mañana a primera hora hablamos.

- Dije que tenemos que hablar y es hoy.

- Creo que no nos estamos entendiendo o no hablamos el mismo idioma, lamento contradecirlo pero hoy no va a poder ser porque hubo un contratiempo en la obra y tengo para un buen rato...

- J&der! ¿En qué obra estas? Paso por ahí

- J%der tío, que insistente!!! ¿Tan urgente es?

- Ojo con los modales, soy tu jefe.... es urgente, dime donde estás car@jo

- Ok, estoy en la obra de Irureta - Martínez

- Perfecto, en 30 minutos estoy ahí.

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-. 30 minutos más tarde .-

Aparece Francisco y nada más verlo me sonrojo cuál por qué me mira de forma insistente con esos ojos azules qué son mi muerte parece que me traspasa con ellos. Nota que estoy estresada y levanta su mano para acariciar mi mejilla y me habla suave mientras me mira con ganas de besarme. Yo en este momento no le diría que no, ganas son las que me sobran de probar esos labios…

- Hola

- ¿qué era tan urgente que no podía esperar a mañana?

- podemos hablar en la oficina

- sí pasa

- mira la semana que viene tengo que viajar Sídney y necesito que vengas conmigo espera el nuevo proyecto y es sumamente importante contar con tu presencia.

- Eeeh… no sé qué decir… es la primera vez que voy a trabajar en un proyecto internacional, ¿por qué no vas con Pablo? El tiene más experiencia que yo en esa área.

- Porque yo soy el jefe y quiero que tu me acompañes. ¿Algún problema?

- No, ninguno.

- Perfecto, después te mando todos los arreglos del viaje. ¿Qué problema hay aquí?

- Hubo un problema con una cañería que quedó corta por un tema de sanitaria y ahora las medidas para las demás cambiaron, a no ser que quitemos todos los caños y rehagamos todo, pero nos va a costar 100.000 más y 3 semanas más de trabajo además las horas extras a los empleados.

- LPM! ¿Cómo pudo suceder eso? ¿No tenemos un capataz de la obra que supuestamente se encarga de todo eso? Déjame ver los planos.

- No lo sé… estoy super estresada.

- Bueno podríamos mover esta pared de acá y quitarle unos centímetros a este baño donde está la cañería y rehacer toda la mampostería de este lado, tenemos que hacer un nuevo plano de este piso previo a venderlo.

- Si, eso mismo estaba pensando.

- Viste que no somos tan distintos…

- Jajajajaja yo soy más buena que vos, no me exalto tanto.

- ¿Quiero que quede claro que nos vamos juntos a Sídney, por tus capacidades profesionales, sos la mejor arquitecta de la firma, ok?

- De acuerdo, me gusta que me veas como una igual en el ámbito laboral, es alentador que a uno lo tengan en cuenta y lo premien por el trabajo que realiza. Además, el que lo dice es el mejor arquitecto del país.

- Te entiendo, y quiero que te quedes tranquila que pase lo que pase entre nosotros no va a cambiar nada en la oficina. Vas a seguir siendo la arquitecta más antigua y confiable.

Suena el teléfono de Sofía, cortando el diálogo entre los dos, me está llamando Evangelina por lo que Francisco agarra sus cosas y me deja sola.

- Hola Eva, ¿Cómo estás?

- Hola, amiga bella, estoy bien, solo recordándote que en un rato quedamos de ir a lo de Juli.

- Quédate tranqui que no me olvide, a pesar de todo el trabajo que tengo jajaja, además tengo una noticia que darte…

- ¿Qué pasó? Se te declaro el divino…

- No loca, en una semana me voy de viaje con mi jefe a Sídney.

- OMG! ¿El jefe divino es el que va contigo? Por dios, lo que va a ser eso…

- Shhh…. Que cosas dices… voy a trabajar a Sídney, bueno voy a terminar esto que tengo acá entonces salgo a tiempo.

- Ok, chau… no te olvides del alcohol.

- Bueno, ahora pasó por el super y compro todo el alcohol que me pidieron borrachas. Chau

Antes de que terminara de hablar con su amiga entra nuevamente Francisco, se nota que escuchó la ultima parte de la conversación, viene sonriendo, algo que no hace nunca

- ¿Se van a divertir esta noche?

- Si eso parece… a mis amigas cualquier día les viene bien para festejar. Bueno creo que esto está pronto, sólo faltaría hacer el plano de nuevo. Voy a aprovechar a pasar por la oficina y chequeo todo con el plano original.

- Ok, yo me quedo porque voy a hablar con el capataz y para comunicarle los cambios.

- Bueno, nos vemos más tarde. Cualquier cosa me llamas al móvil.

- Dale, te llamo más tarde.

-. 2 horas más tarde .-

Sofía sale del estudio sin haber vuelto a ver a su jefe gruñón, por lo visto se quedó en la obra discutiendo con los obreros. Subo a mi auto y veo que tengo un mensaje de Juli diciéndome que vaya directo para su casa porque hoy salió antes del bufete, raro porque habíamos quedado que la pasaba a buscar pues hoy vino con María y ella sigue en el juzgado. Le mando un mensaje diciéndole que ya estoy yendo. Cuando llego la llamo y le digo…

- Amiga estoy abajo, ya subo.

- Genial! Ya estoy aprontando todo.

- Ok, prepárame un trago bien fuerte, que lo necesito con urgente y también un consejo.

Se abren las puertas del ascensor y veo que Juli ya tiene un whisky en la mano y me mira interrrogándome ya que siempre soy a la que le cuesta hablar de sus problemas, por lo que no duda en abrazarla.

- ¿Qué pasó peque?

- Hoy estuve a punto de besar a mi jefe, estoy re loca y lo peor es que la semana que viene nos vamos juntos a Sídney por trabajo, ¿qué voy a hacer?

- ¿cómo? Vos siempre sos la racional, la impulsiva soy yo jajajaja. Es contagioso por lo visto…

- Jajajaja que mala.

- Bueno vamos que se hace tarde, vamos a casa a preparar nuestra noche de chicas.