Mundo de ficçãoIniciar sessãoEl sol apenas entraba por las cortinas cuando Caroline abrió los ojos. Sentía un peso distinto en el cuerpo, una mezcla de cansancio y alegría que la acompañaba en cada amanecer. A su lado, Mariano la observaba con una sonrisa somnolienta.
- “¿Otra vez no dormiste bien?”, preguntó Mariano acariciándole el cabello. - “La bebé no me dejó en paz… o el bebé, todavía no sabemos”, respondió Caroline, girándose con lentitud hacia él. “Se mueve demasiado, o quizá es mi imaginación”. Mariano apoyó la mano en su vientre, con cuidado. - “Entonces tendremos un pequeño terremoto en casa”, comentó Mariano y besó suavemente su barriga. “Y yo feliz de que me despierte”. Caroline soltó una risa baja. - “Lo dices ahora, pero cuando no nos deje dormir vas a ver”, expresó Caroline. - “Yo puedo con todo”,.replicó él, con esa






