Punto de vista de Josefina
Sosteniendo el pedazo de papel en mis manos, Enrique me pide de nuevo la dirección.
El GPS no podía encontrar ninguna propiedad a lo largo de esta pequeña carretera.
—Tiene que estar aquí en algún lugar. ¿Qué dijo tu mamá? —Enrique preguntó mientras acercaba el mapa del GPS.
—Solo que lo sabría cuando lo viera.
—Eso no es particularmente útil.
—Sabes... creo que está allí. —Mis ojos escaneaban la línea de árboles que seguíamos pasando.
—¿Dónde?
—Allí, en el bosque. —Golpeé la ventana.
Cada vez que dábamos la vuelta y volvíamos por este camino, tenía la sensación de que el lugar estaba aquí, simplemente no podíamos verlo desde el camino.
—Creo que necesitamos hacer el resto a pie.
—¿No estás hablando en serio?
—Está escondida, ¿qué mejor cobertura que un denso bosque oscuro?
—No le estás dando confianza a mi lobo aquí, PelirPelirroja. —se quejó mientras estacionaba el auto de la manada al lado del camino y lo ponía en posición de estacionamiento.
Sus ojos mira