Punto de vista de Josefina
—Quizás seamos nosotros quienes deberíamos hacer preguntas... —Enrique dio un paso más adentro de la compacta y anticuada sala de estar. Era como si hubiéramos viajado en el tiempo.
Ella no se movió, mirando a Enrique con sospecha antes de burlarse de su audacia.
—Puedo ver que la Diosa de la Luna continúa emparejando la línea femenina con un cierto tipo. —Se movió lentamente pasándolo, dirigiéndose hacia su área de cocina.
—¿Un cierto tipo? —se elevó sobre ella, su pequeña figura no mostraba señal de temerle.
—Lo que me recuerda, ven... —Se movió a su pequeña área de cocina que consistía en una sola encimera de madera, algunas ollas, un fregadero e interesantemente esos frascos.
Tomó algo de un armario inferior, levantó la tapa de un frasco y espolvoreó hierbas en un pequeño frasco, agitándolo.
—... para que permanezcas aquí con tu compañera, necesitas beber esto. —Colocó el pequeño frasco frente a Enrique, sus ojos lo miraban con desafío.
—No voy a beber es