Dos años han pasado desde aquel día en Sicilia donde Clara y Ethan sellaron su amor frente al mar Mediterráneo, rodeados de flores, amigos y la risa cristalina de Ava.
La vida, lejos de ser perfecta, ha tomado forma de cuento real: uno donde las cicatrices no desaparecen, pero se vuelven parte de la belleza de la historia.
Ethan camina por el pasillo de su nueva sede empresarial, un rascacielos de vidrio y acero que ahora lleva su nombre.
La Knight International ha crecido, diversificándose en nuevas áreas con un enfoque social, algo que Clara lo inspiró a integrar desde el primer momento.
Aunque su agenda es apretada, nunca se pierde el desayuno con Clara y Ava, ni los viernes de cine en casa, ni las tardes en la fundación que su esposa ha levantado con el corazón: "Renacer".
La fundación de Clara se ha convertido en un refugio para mujeres que han vivido lo que ella y Lara sufrieron.
Es un espacio de sanación, empoderamiento y justicia. Clara dedica sus días a visitar casos, dir