Cuando entraron a la iglesia, el lugar estaba repleto de invitados. La mayoría, representantes de los medios y redes sociales. Apenas los últimos bancos se encontraban desocupados. Por lo que Jeremías y Macarena tuvieron que tomar asiento en uno de ellos.
Sin embargo, el hecho de que Inés no pudiera verlo, era muy conveniente para Jeremías. Tendría un poco más de tiempo para cuando dieta inicio el espectáculo que tenía preparado.
En ese momento, la música de fondo, se escuchó y los aplausos no se hicieron esperar, Isabella entró del brazo de su padre, vistiendo un impactante vestido de cola larga, rumbo al altar.
En ese preciso instante, mil emociones diferentes convergieron dentro de Macarena. Una sensación de tristeza profunda la invadió al ver que aquella chica ocupaba su lugar e iba acompañada de su padre.
Ella también hubiese deseado que su padre la llevara del brazo hasta el altar, pero… él había muerto cuando apenas era una niña o eso le dijo su madre justo un año atrás ante