Mundo ficciónIniciar sesión—No sé de qué hablas.
Las palabras de Aleksandr cayeron en el silencio de la habitación como piedras en agua estancada. Valeria lo miró fijamente, viendo la máscara de indiferencia que intentaba mantener, pero también viendo las grietas en ella.
—Mentiroso —susurró.
Aleksandr se levantó, alejándose de ella, sus manos apretadas en puños a sus costados.
—Tu padre murió en un accidente. Hace diez años. Eso es todo lo que hay que saber.
—¿Y la investigación federal? ¿Los documentos bancarios? ¿El tráfico de niños que Dmitri...?
—¡Basta! —la voz de Aleksandr tronó en la habitación, haciéndola saltar—. No sé qué basura te ha estado llenando la cabeza, pero necesitas olvidarlo. Ahora.
Se acercó a ella nuevamente, tomá







