Mundo ficciónIniciar sesiónLa luz matutina del hospital llegaba a través de las cortinas translúcidas, tiñendo todo de un blanco fantasmal que hacía parecer irreal a Valeria. Sus ojos parpadeaban lentamente, tratando de enfocarse en el techo, en la habitación, en cualquier cosa que le ayudara a anclar su mente a la realidad.
No recordaba nada de las últimas horas.
La anestesia había borrrado su memoria como si hubiera pasado una goma sobre un dibujo a lápiz. Había momentos difusos. Aleksandr de pie junto a su cama. Nikolai. O tal vez ambos. Pero nada claro. Nada definitivo. Solo sensaciones y sombras.
Su cuerpo doloría de maneras que no podía articular. Su abdomen era un territorio desnudo de sensibilidad. Sus braz







