Abro despacio mis ojos cuando escucho un segundo disparo, sintiendo que debería estar muerta; no logro entender lo que está pasando. Cuando entorno mis ojos hacia el frente veo a Daniel, que ya no me está apuntando a mí; inconscientemente me toco, y no encuentro ni siquiera un rasguño. En medio de mi aturdimiento escucho que alguien grita, sacude mi cabeza para poder enfocarme; guio mi mirada hacia el grito y mi corazón se detiene por unos segundos, mi respiración se atora en mis pulmones conforme los latidos de mi corazón se paralizan.
Lucas está tendido en el piso, a su lado se encuentra Alex, diciéndole algo que no puedo escuchar ni descifrar; Gaby a su otro costado apuntando a Dany, e Ian un paso adelante, también lo apunta.
Escucho otro disparo, y es ahí cuando vuelve a funcionar mi cuerpo; corro hacia donde están ellos, hacia donde está Lucas en el piso, y caigo de rodillas a su costado.
—¡¡Lucas!! —le grito, sacudiéndolo—. Lucas, por favor —Lloro sobre él sin dejar de zamarrear