Alessandro movía la pistola de un lugar a otro, disfrutaba ver como Elena se consumía en el terror que él causaba en ella; recostó su trasero sobre una pequeña mesa, levantó la mano que estaba libre y los señaló como si fueran la cosa más pequeña.
—Por fin pude llegar hasta el escondite de mamá rata y sus pequeños, tú y estos niños son los culpables de que haya perdido a Leonardo, mi hijo, mi gran orgullo, todo lo perdí... Mis planes se fueron al carajo porque decidiste aparecer en su vida.
»Quién iba a pensar que Leonardo fuera a tener tan pésimos gustos, solo un tonto te prefiere a ti en lugar de Cristina, esa mujer era la indicada para Leonardo, pero terminó tomando su peor decisión, tú lo único que has causado ha sido desgracia para mi familia —con cada palabra que salía de su boca Alessandro mostraba cuanto la detestaba.
—Por favor no nos haga daño, soy tu nuera y ellos tus nietos, no importa cuanto nos odies nunca dejaremos de serlo, somos todo para Leonardo y si lo que está pr