Tiempo actual.
Los invitados se esparcieron rápidamente, todos corrieron hacia la parte interior de la mansión para ponerse a salvo, en el patio solo quedaron los afectados de manera directa.
Elena se levantó, su cuerpo temblaba mientras daba pasos cortos acercándose a su hija, Leonardo desesperado intentaba mover el cuerpo de Nico, quien había recibido todos los disparos.
Leonardo tomó su móvil y se comunicó con Luca, ordenó que todo el personal fuera hasta el lugar.
Lorenzo y Teresa estaban destrozados, tirados de rodillas junto al cuerpo sin vida de su hijo, Anna llevó sus dos manos a la cabeza mientras gritaba desesperada, Elena intentaba consolarla, pero ella no quería escuchar nada.
Los paramédicos llegaron a toda prisa, una vez se acercaron a Nico revisaron sus signos vitales. Apretaron los labios y dieron la terrible noticia de que ya no había nada que hacer.
En ese momento el llanto incrementó, Leonardo no tenía la cara para darle a la familia de Nico, era su único hijo y